La continuidad de Vrankic se le antoja muy difícil al GBC

El Gipuzkoa Basket se topa muchas temporadas con una realidad palmaria: es muy complicado retener a los jugadores que han tenido una temporada exitosa porque clubes con más músculo económico y retos deportivos mayores se quieren hacer con sus servicios. Hace dos temporadas el ejemplo fue cristalino con Barcello, Aurrecoechea y Oroz, los jugadores que mejor rendimiento ofrecieron. El de Phoenix se fue a Heidelberg, a la primera División alemana; el poste de Torrejón al Granada de ACB y el azpeitiarra al Palencia uno de los gallitos de la categoría. Esta temporada vuelve a pasar lo mismo porque el club estaría encantando con retener el talento de Josip Vrankic por tercera temporada consecutiva pero el canadiense está lejos de seguir en el Gipuzkoa Basket.

La culpa la tienen sus números. 15 puntos, cinco rebotes, dos asistencias y un robo por partido para 16 créditos de valoración. Numéricamente, el jugador de origen croata ha sido el mejor del Gipuzkoa Basket en esta temporada y las sensaciones vienen a decir lo mismo. Ha pasado de veinte puntos en siete ocasiones y ha sido MVP de la jornada con 35 créditos de valoración.

Esos números han hecho que varios equipos de primer nivel de la Primera FEB se hayan interesado por él y también otros de ligas punteras europeas. El principal rumor apunta a que el Obradoiro quiere hacerse con los servicios del canadiense y aunque el Gipuzkoa Basket desea que se quede, los rectores guipuzcoanos son conscientes de que va a tener ofertas superiores encima de la mesa. Ahora mismo Vrankic se encuentra de vacaciones, ha estado en Croacia visitando a sus parientes, y aguarda una posible llamada de la selección de Canadá con la que estuvo en las ventanas FIBA el año pasado para la clasificación de la Copa América de este año.

Vrankic ha estado ene l GBC las dos últimas temporadas y ha dejado patente su clase , compromiso y talento. Jugó los playoff de hace dos temporadas con la mano casi rota -se tuvo que operar en verano- y este curso pasado un esguince de tobillo le impidió estar en los dos primeros partidos del playoff ante el Estudiantes. Se puede decir que es el colmo de la mala suerte.

«Nunca he vivido en un sitio como en Donostia», confesó en una amplia entrevista concedida a este periódico. El GBC sabe que tiene muy complicado que esté en Illunbe para empezar la pretemporada este verano, aunque no ha dudado en hacerle una oferta superior a la de este año. Por ello escanea y tantea otras opciones para acompañar a Manex Ansorregi en el puesto de 'cuatro'.