Los tres baskonistas cedidos en el Juaristi ya han encontrado acomodo

Era muy difícil, por no decir imposible, que los tres cedidos por el Baskonia la pasada temporada repitieran en el Juaristi Iraurgi, y ha quedado comprobado una vez que se han conocido los destinos de Pavel Savkov, Ondrej Hanzlik y Sidy Cissoko.

Empezando por el ruso, quien mejor rendimiento ha dado en en sus dos temporadas en el equipo guipuzcoano (12,6 puntos en 61 partidos), se ha hecho oficial este jueves su cesión al Carplus Fuenlabrada. El alero de 20 años debutará de esta manera en la ACB para seguir la progresión natural que está teniendo, ya que año a año ha ido mejorando sus prestaciones técnicas y fortaleciendo su cuerpo a las exigencias primero de la LEB Plata y después a las de la LEB Oro.

Después de ser durante dos años compañeros de viaje a diario en el trayecto Gasteiz-Azpeitia, su amigo Ondrej Hanzlik pasará a ser rival porque el checo jugará, también cedido, en el recién ascendido a la ACB Basquet Girona de Marc Gasol. Hanzlik, de 20 años, ha jugado 58 encuentros con la elástica del Juaristi Iraurgi, en los que ha promediado 9,3 puntos y casi dos triples anotados por partido, con acierto del 36,3%.

Le ha costado más adaptarse a la LEB Oro y durante fases de la temporada no ha rendido al nivel que se esperaba, siendo muy frecuente que el error o el fallo en el lanzamiento le lastrara demasiado para el resto de los minutos que estaba sobre la pista. En Girona tendrá un gran maestro para pulir esos detalles y seguir progresando como jugador, ya que ha sido el legendario Aíto García Reneses el que ha cogido el mando del proyecto gerundense a sus 75 años.

Por último, aventura más exótica ha decidido tener Sidy Cissoko. Con los ojeadores de la NBA presentes desde muy pronto, el base francés de 18 años ha decidido saltarse el paso de jugar en el Baskonia y ha optado por hacerlo en el G-League Ignite, una estructura que no compite de manera oficial en la liga de desarrollo de la NBA y está dedicado a las jóvenes promesas que pretenden dar el salto a la mejor competición del mundo y no pueden hacerlo todavía, por ejemplo, por no tener la edad mínima.

La marcha es en teoría con billete de vuelta, ya que es en forma de cesión, pero la sensación que da el base francés es que tiene la cabeza ya en la NBA y que su única aspiración es entrar en el Draft de 2023, donde apunta a estar en los puestos nobles de la primera ronda.

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