El IDK Euskotren sale vivo de la morada de Érebo

76 tiros a canasta del conjunto de Ibaeta con 24 aciertos de dos y cuatro desde el triple.El IDK lanzó la friolera de 23 veces más a canasta que el equipo griego, merced a que dominó los tableros, robó muchos más balones y perdió menos.Por eso, con un poco más de puntería, el resultado podría haber sido histórico.

El partido se jugó en la casa del dios Érebo. Que en la mitología griega, es un dios o fuerza primordial de la oscuridad que acaece después de las sombras del ocaso. ​No era de noche cuando se lanzó el balón al aire pero el partido fue como esa deidad helena llamada Érebo. Se decía que sus densas nieblas de oscuridad rodeaban los bordes del mundo y llenaban los sombríos lugares subterráneos. Algo así ocurrió con el aro de la canasta que defendía el Proteas Voulas. Porque la superioridad del IDK era manifiesta. Mucho más rápidas, mejor colocadas y más fuertes.El resultado viendo los primeros segundos de partido no dejaba duda a que el triunfo iba a ser para el IDK Euskotren.

Becky Massey y Alba Prieto anotaron los primeros doce puntos del IDK coronados con tres más de Pendande y Claessens para un 4-15 (min.8). Se acercó hasta cuatro puntos el cuadro heleno y su partido llegó hasta ahí.

Lara se encargó de dominar a Érebo y la donostiarra puso orden, concierto y sobre todo una marcha más.Fue fundamental. Acabó con cuatro puntos, cinco asistencias y cinco robos. Pero lo más importante es que contagió a sus compañeras a jugar un poco más rápido y el IDK cogió doce de ventaja, 19-31 (min. 18).

Volvieron la oscuridad y las tinieblas al juego del IDK. Las jugadoras tiraban solas pero se topaban con el aro.Lo bueno es que capturaron 26 rebotes en ataque (en defensa fueron 28) que les facilitaron el trabajo a la hora de anotar. Un 0-7 mediado el tercer cuarto con un triple de Claessens puso la máxima, 30-44 (min. 25) y la muñeca caliente aunque con cuentagotas de Roso Buch dejó el partido finiquitado, 34-53 a falta de los últimos diez minutos.

En el cuarto final, sin ya nada en juego, sólo comprobar cuál iba a ser la diferencia final, el talento y nivel de las guipuzcoanas desarbolaron por completo al Proteas Voulas que tuvo solo a George como anotadora fiable y algunos tiros de Polymeni y Stoligka.

Niyah Becker y Delicia Washington martillearon el aro griego y las veces que no se anotaba, ahí estaba Pendande para coger el rebote. No hizo falta que siguiera más tiempo en cancha Massey que se retiró con 17 puntos, diez rebotes y tres asistencias en su haber para 28 de valoración.

El IDK Euskotren fue capaz de enterrar a Érebo, dominar el caos, poner orden y marcó una máxima ventaja de 29 puntos, 38-67 (min. 37). La expedición guipuzcoana pone rumbo hoy mismo a Vigo donde juega el domingo y el próximo miércoles visita al Estrella Roja.Donde todo será más difícil.