Con Aretha jamás envejeceremos
Mikel G. Gurpegui
Viernes, 27 de septiembre 2019, 10:21
Ay, 'How I Got Over'; oh, Dios, 'What a Friend We Have in Jesus'. En la cresta de su carrera, la reina del soul Aretha ... Franklin decidió grabar un doble disco de godspell en una iglesia baptista de California. Dos noches de 1972 que dieron lugar a 'Amazing Grace' ('Divina gracia'), su álbum más vendido y venerado.
Ay, 'How I Got Over; oh, Dios, 'Wholy Holy' (de Marvin Gaye y la voz de Aretha como un ángel). La Warner encargó a Sidney Pollack que grabase los conciertos, lo que hizo. Sin embargo, un problema técnico, un desajuste entre sonido e imagen, dejó las filmaciones en un almacen. Antes de morir, Pollack pidió que se recuperaran, lo que se ha hecho ahora gracias al productor Alan Elliott.
Ay, qué versión del 'You've Got a Friend' de Carole King; oh, Dios, 'Precious Memories' (con esta confieso que se me saltaron las lágrimas). El concierto no estaba pensado como show visual y una iglesia reducida no era el mejor sitio para filmar el concierto. El coro canta la mayor parte del tiempo sentado. El piano de Aretha y los instrumentistas están encajonados entre el altar y las sillas. Las cámaras se mueven por los pasillos, sin sitio y a veces tardan en enfocar su objetivo. Y qué más da.
Ay, 'Old Landmark'; oh, Dios, 'Climbing Higher Mountains' (con un blanco dando palmas en la última fila, Mick Jagger). 'Amacing Grace', el sudoroso concierto musical, conmueve. El maestro de ceremonias, el reverendo James Cleveland, calienta el ambiente en esta celebración de la fe (sí, también de la fe religiosa), de la comunidad, de la alegría, de la vida. Y junto a ello una Aretha Franklin como un milagro, seria cuando no canta, un huracán de belleza y pura emoción en cuanto abre la boca. Y el coro y los feligreses dando caña. Salimos sonriendo, salimos llorando. Y sabiendo que con Aretha jamás envejeceremos, 'Never Grow Old', oh, Dios.
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