El 'nuevo' Anoeta está preparado para el rock

El lugar donde actuaron U2, dos veces, Bruce Springsteen, tres, o los Rolling Stones, entre otros, está listo para acoger nuevas citas. Desde la Real Sociedad, gestora del campo, se apunta a este periódico que la infraestructura podrá usarse para la música, «como siempre, a condición de que no suponga problemas para el uso deportivo por parte del club». Iñigo Argomaniz, de la promotora musical Get In, responsable hasta ahora de las grandes citas celebradas en el estadio, reafirma que «siempre trabajamos con la idea de organizar conciertos en Anoeta». El problema, más que en el recinto, reside en el público y en los artistas. «Sabemos bien que hoy en día apenas media decena de nombres sería capaz de reunir a 40.000 espectadores en un concierto en San Sebastián. Nosotros siempre manejamos esa posibilidad, y aunque no hay nada cerrado ahora mismo no descartamos que antes o después, o más antes que después, traigamos a una figura. Donostia gusta a los artistas y prácticamente todos los grandes conciertos en la ciudad han resultado un éxito».

Argomaniz, fiel realista y habitual de Anoeta, confiesa que como aficionado al fútbol disfruta más ahora que cuando se trataba de un estadio con pistas. Pero recuerda con orgullo algunas de las grandes citas musicales en la historia del estadio. «El primero, con Pink Floyd, en 1994, poco después de la inauguración, resultó emocionante: al fin teníamos en Donostia un espacio donde dar grandes conciertos en las mejores condiciones. El del centenario del Orfeón Donostiarra, en 1997, fue muy especial: logramos 30.000 espectadores de pago para un coro que solo unos días después actuaba gratis en Getaria. Era la magia del Orfeón, sin duda. La gira '360 grados' de U2, en 2010, nos dio el concierto de más espectadores: vendimos 50.000 entradas porque al estar el escenario en el centro el público podía extenderse por todos lados. Y la triple cita de Springsteen no solo fue espectacular, sino que vinculó a Bruce para siempre con Donostia».

Son recuerdos de Anoeta, donde también actuaron Bon Jovi o los Rolling, entre otros. Pero lo mejor puede estar por llegar. Izaskun Larzabal no solo es la autora del proyecto del nuevo Anoeta: también trabajó con Get In en el diseño de la seguridad de sus conciertos en el estadio y conoce bien los detalles del espectáculo. «Cuando desde las instituciones y desde la Real se acometió la reconversión desde el primer momento se contempló la idea de que el campo debía estar preparado para acoger grandes espectáculos».

Como recuerda Argomaniz, hasta ahora la existencia de las pistas de atletismo permitía que los camiones del montaje entraran por ahí sin dañar el césped. «El cambio no es problema», responde Larzabal. Hay una 'calle' de seis metros de anchura media que rodea el terreno de juego. Es una banda con hierba en la superficie pero cemento debajo, y recibe camiones o grúas sin problemas. La dejamos pensando también en otras necesidades del fútbol, y se ha usado los últimos meses para las propias obras del campo».

Los accesos directos al campo por el fondo sur, donde se suele situar el escenario de los conciertos, se han dejado también más altos, lo que permite la entrada de grúas o maquinarias sin problemas. Y también es una mejora que el terreno de juego está hoy en día conectado directamente con las gradas a través de unas cancelas. «Antes, cuando había conciertos teníamos que colocar unas plataformas de seguridad que unían el campo con las graderías para garantizar las vías de evacuación: ahora ya no es necesario», apunta Izaskun Larzabal.

La mejora del aforo, gracias a los nuevos fondos, permitirá llegar a 45.000 espectadores, dice la arquitecta, y también una acústica más ajustada. «El estadio era más abierto; el campo, más cerrado en forma de caja, permitirá escuchar la música en mejores condiciones y más cerca de los músicos». La reforma también ha permitido elevar la potencia eléctrica de Anoeta. «Hubo conciertos en que se añadieron elementos externos para ampliar la potencia, pero en la obra hemos ampliado el centro de transformación y probablemente no hagan falta esos añadidos», explica Larzabal.

La autora del nuevo Anoeta no se cansa de certificar mejoras. «La premisa al acometer la reforma era la polivalencia de la infraestructura. Sabemos que lo principal es su uso por la Real como campo de fútbol, pero tiene que estar preparado, como un recinto moderno, para la música y los espectáculos que puedan llegar. La única 'luz roja' es el mantenimiento del césped en condiciones, pero eso es una cuestión común a todos los estadios del mundo que se usan para el rock o para la música. Por eso en muchas ocasiones los conciertos se celebran a final de temporada o en los meses de verano, cuando hay tiempo para garantizar el perfecto estado del terreno cuando comienza de nuevo la competición».

¿Qué artista inaugurará el nuevo Anoeta? «Siempre trabajamos con esa idea, pero no es fácil encontrarlo», dice Iñigo Argomaniz. «En Madrid hay artistas españoles que llenan estadios, como Alejandro Sanz, pero aquí necesitamos figuras internacionales, y son pocas», responde. Atentos pues a las próximas giras de los grandes nombres. Anoeta espera.