Juan San Martín emerge del confinamiento como cantautor multinstrumentista con un disco

Además de cantar y componer, Juan San Martín toca todos los instrumentos (batería, bajo, guitarra acústica y eléctrica, teclados, palmas e incluso sonidos orquestales en 'No sueltes mi corazón') y ha ejercido de técnico de sonido y productor de la grabación. También desde su habitación se ha encargado de elaborar el vídeo promocional para el single 'No sé si quererte' y de la estrategia promocional en Instagram. La autogestión de estos tiempos, llevada a rajatabla.

El resultado está desde hace una semana en las principales plataformas y Juan ya empieza a lograr adeptos a ese potencial de 'hit' que tienen canciones de pop romántico y coreable como 'No sé si quererte', cercanas a un Ed Sheeran donostiarra que no oculta su querencia por la música de Mikel Erentxun, Izaro, Alex Ubago o La Oreja de Van Gogh, aunque nada tiene que ver con el teclista del quinteto, a pesar de la coincidencia del apellido, solo que «le tengo mucha admiración». En las canciones de Juan San Martín también se detectan raíces americanas, «me gusta mucho el country, pero también la música electrónica». Y el gusto por las armonías vocales le viene de «clásicos que siempre me han gustado, como The Beatles o Crosby, Stills & Nash».

A sus 26 años, Juan San Martín lleva ya largo tiempo en la música, teniendo en cuenta que cuando tenía solo doce, decidió que lo suyo era esto: «En un campamento vi a mi primo mayor, al que le tenía mucha admiración, tocando la guitarra y se me abrió un mundo. Aprendí a tocar la guitarra de forma autodidacta, luego me metí en el mundo de la producción buscando todo lo que podía y aprendí a tocar el piano, el bajo y algo de batería». Ha estado también en grupos desde chaval: primero en Iconic y luego en otro proyecto con su hermano gemelo Miguel, Paraíso 19. «Tenía unas canciones que no le gustaban mucho a mi hermano, para el estilo que hacíamos juntos. Así que durante el confinamiento decidí que iba a componer algunas canciones nuevas que fueran absolutamente mías, grabarlas y publicarlas». El EP se titula 'Paréntesis', «que es como estamos todos con el confinamiento, en una especie de paréntesis». Pero no es un proyecto efímero, «al contrario, voy con toda la ilusión del mundo».

«Aprendí a grabar y producir mis propias canciones, pero ahora he tenido que investigar también cómo hacer que lleguen a la gente», explica. Decidió invertir «un poco de dinero» en la opción promocional de Instagram y allí depositó un avance de 'No sé si quererte', «porque pensé que la gente necesitaría más ese tipo de ritmos alegres, y parece que he acertado, por los comentarios que ha habido». Para el vídeo, también sin salir de la habitación, pensó «qué podía hacer en casa, así que cogí una pizarra en mis manos y luego con el ordenador fui poniendo la letra de la canción mientras voy cantando». Ya está en Youtube, con algunos comentarios efusivos.

Las cuatro son canciones sobre el amor («es que es un tema eterno»), con variantes: «Al amor cuando está empezando, cuando ya lo tienes, cuando lo has perdido, y la cuarta, 'Te abrazaré', es algo diferente, sobre la violencia de género y las mujeres que lo han pasado mal». Ahora está deseando que empiecen los conciertos en directo para tocar en bares o salas, «donde me dejen».