«No nos importa que nos quiten el carné de 'heavys'»
Dravernue espera presentar en Larratxo su debut, una ópera metal con una veintena de colaboraciones
Lejos de presentarse con un trabajo sencillo, casi se diría que Dravernue ha querido complicarse la vida al máximo con su debut discográfico. Es cierto ... que sus componentes han militado ya en grupos como Mandrágora Negra, Dawnmaster, Hiverland o Drakken, pero en este nuevo proyecto los donostiarras han dado el do de pecho con una ópera metal en la que participa una veintena de músicos y dobladores. Casi nada.
Raúl Gil (voz) y Unai Iglesias (guitarra) son los principales impulsores de 'Proyecto D.A.G.D.A.', título de este ambicioso artefacto que, además, se complementa con una novela corta. Los autores del texto son el propio Iglesias, Judit Andreu y Alex Rodrigues, bajista de Dravernue. «Yo recibía un capítulo y a partir de ese material creaba la letra y la melodía de la canción, intentando usar frases del libro para que hubiera guiños y cierta concordancia», explica Raúl.
Autoeditado y grabado en el estudio casero de Unai con Ekaitz Acedo (batería) y Eider Bailador (teclados) completando la formación, 'Proyecto D.A.G.D.A.' está ambientado en Dravernue, un reino amenazado por las fuerzas del mal. Sólo la magia del rey puede ofrecer protección a sus habitantes, y ante la ausencia de un heredero de sangre real, el monarca busca entre los jóvenes de la ciudad a aquel destinado a sucederle para continuar su legado.
Por la trama desfilan reyes, siervos y castillos, pero también aparecen fábricas, chips y hackers rebeldes. «Como en todas las distopías, la metáfora sirve para hacer una crítica de la sociedad actual, en este caso de los medios de control social… Esa pulsera que llevan los ciudadanos de Dravernue no sería tan distinta a un 'smartphone' que controla todo lo que hacemos, casi hasta lo que pensamos», apunta Raúl.
Ambos músicos reconocen haber sido «muy ambiciosos» porque «el mayor error que puede cometer un músico es ponerse frenos a uno mismo». Entre las colaboraciones que «enriquecen» el conjunto del álbum destacan las de artistas de la talla de Isra Ramos (Avalanch), Pablo García (Warcry) o Aitor Gorosabel (Su Ta Gar). «Contar con ellos ha sido cumplir un sueño musical», dicen de los miembros de algunos de sus grupos favoritos junto a nombres como Mago de Oz, Saratoga, Idi Bihotz, Edguy, Dream Theatre o Nightwish.
El apartado de los dobladores, que protagonizan varios pasajes hablados del disco, es igualmente sobresaliente. De hecho, para los miembros de Dravernue es un «premio» haber conseguido la colaboración de Ramón Langa (voz de Bruce Willis y Kevin Costner, entre otros), José Posada (Matt Damon, Jude Law…), Nuria Mediavilla (Uma Thurman, Angelina Jolie…) y, sobre todo, el «ídolo» Pepe Mediavilla. Suya es la mítica voz de Morgan Freeman en castellano y también la de Gandalf en 'El señor de los anillos'. «Le mandamos un mensaje por Facebook ofreciéndole la colaboración y nos dijo que sí. ¡No podíamos creerlo!», dicen, con agradecimiento infinito hacia el doblador, fallecido en abril de 2018, poco después de grabar esta colaboración con los donostiarras, que fue su último trabajo.
Nos gustaría ofrecer todo un show, ser el grupo ese que hace teatro aparte de dar un concierto», aseguran Dravernue
En lo estrictamente musical, en este proyecto han «mezclado» diversos estilos: ellos comparan su propuesta con de la de Avantasia, grupo de power metal sinfónico con influencias operísticas, pero también hay toques progresivos, oscuros, algo de electrónica e incluso un rap. «Hemos intentado enriquecer lo máximo posible y no renegar de lo que nos gustaba. A veces, en este tipo de música, si te sales de lo establecido te pueden criticar por ser demasiado pop», dice Raúl sobre el uso del autotune en la canción que cierra el disco. «¿Qué si tenemos miedo de que nos quiten el carné de 'heavys'? A estas alturas no nos importa», bromea Unai, que se congratula de que se hayan roto los estereotipos del género. «Ya no vamos todos vestidos con cuero negro. De hecho, conoces a gente que sabe más que tú de música metal y va con polo Lacoste», asegura el cantante.
Máxima teatralización
En abril iban a tocar en Larratxo abriendo el Euskal Metal Fest para Barón Rojo, pero la pandemia frustró un concierto que esperan ofrecer el 26 de diciembre con todo el aforo vendido. Como tantos otros grupos, el confinamiento hizo que les cancelaran los conciertos, pero aprovecharon el tiempo para trabajar en nuevos temas y grabar vídeos -precisamente, hoy ve la luz el de 'La quimera', uno de los 18 temas del disco-.
Si el coronavirus se lo permite, les gustaría presentar este trabajo «teatralizándolo al máximo» con el uso de recursos escénicos y la colaboración de más intérpretes que le den en directo ese toque operístico. «Tiene que ser todo un show. Queremos ser el grupo ese que hace teatro aparte de dar un concierto. Nos gustaría ofrecer el mayor espectáculo que podamos, sin renunciar a nada. Tenemos el culo 'pelao', llevamos muchos años en la música, y ya no renunciamos a lo que nos gusta, no pensamos en si puede funcionar o no, sino en hacer lo que queremos hacer», concluyen, dejando la puerta abierta a una continuación de 'Proyecto D.A.G.D.A.'.
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