Se licencia la segunda promoción de carpinteros de ribera de Albaola
Los cinco nuevos especialistas formados en Aprendiztegi tienen ya encaje laboral en proyectos relacionados con la construcción naval
La escuela de carpintería de ribera de Albaola, Aprendiztegi, acaba de licenciar a la que es ya su segunda promoción de especialistas en construcción naval tradicional. Los cinco nuevos carpinteros de ribera han completado tres años de formación en el centro de la factoría pasaitarra, una de las iniciativas más singulares que existen a día de hoy en el campo de la docencia. Cinco de ellos se licencian con un encaje laboral en proyectos relacionados con la construcción naval, lo que confirma la proyección en el mercado de trabajo de una especialidad que solo se puede estudiar en España en la escuela de Albaola.
Los nuevos carpinteros de ribera son Ionna Moutousidi, Giannis Bormpantonakis, Daniel Constain, Saul Hoffman y Federico Monsalve. Proceden de sitios tan dispares como Grecia, Colombia, Italia o Madrid. Esa diversidad de orígenes es una de las características del alumnado de Aprendiztegi. Los siete nuevos aprendices que se han incorporado este curso a la escuela provienen de Cáceres, Austria, Huelva, Francia, Gipuzkoa y Suiza.
Han colaborado en proyectos como el del patache 'Juanita Larando', de quince metros de eslora, la motora 'Ixil-ixil', de ocho metros de largo o el sándalo 'Laguna', una embarcación tradicional veneciana de 6,4 metros
El presidente de Albaola, Xabier Agote, ha recordado que Aprendiztegi reproduce el sistema de enseñanza concebido por Lance Lee en 1972, precusor de los cursos de construcción naval tradicional en Estados Unidos. El responsable de la factoría se ha felicitado especialmente por la graduación de la primera mujer que sale de los talleres de Albaola, Ionna Moutousidi, en un universo profesional monopolizado por hombres. «Ionna ha abierto con su arrojo y determinación una senda para que muchas mujeres construyan, además de barcos, un mundo libre y de igualdad».
La propia Moutousidi ha destacado «el ambiente agradable que ha habido en Albaola y entre los aprendices», al tiempo que se ha felicitado también por «las oportunidades y conocimientos» que ha adquirido durante los tres cursos que ha estado en Pasaia.
La formación que se imparte en Albaola tiene una marcada impronta práctica y desde el primer día de clase los aprendices trabajan ya en las embarcaciones que se construyen en la factoría. Los cinco nuevos licenciados han tenido la oportunidad de intervenir en proyectos como el del patache 'Juanita Larando', de quince metros de eslora, la motora 'Ixil-ixil', de ocho metros de largo o el sándalo 'Laguna', una embarcación tradicional veneciana de 6,4 metros.