El lehendakari visita la nueva sede de El Diario Vasco

El lehendakari vivió ayer desde dentro cómo se hace EL DIARIO VASCO. Iñigo Urkullu recorrió las nuevas instalaciones del periódico en Miramon, se interesó por el proceso que siguen las noticias en su camino al encuentro con los lectores y participó en la reunión matinal con los jefes de la Redacción: más aún, fue «director» durante un rato y confeccionó una Primera con los temas del día que más le llamaron la atención, invitado por el director de DV, David Taberna. «Soy de los que buscan siempre las noticias positivas en los periódicos... aunque cada vez es más difícil encontrarlas», bromeó.

La visita del lehendakari estaba pendiente desde la inauguración de las modernas instalaciones de El Diario Vasco el pasado mes de mayo. Ayer pudo conocer a fondo la nueva sede en Miramon y sobre todo preguntar con curiosidad cómo funciona la maquinaria del periódico, desde los engranajes de las diferentes ediciones locales hasta cómo combate la sección de Deportes con las horas de Cierre ante unos partidos cada vez más tardíos. Fuera de protocolos, en la reunión con la Redacción, el mandatorio parecía disfrutar al escuchar cómo se 'cantan' los temas del día. Y hasta sonreír cuando se anunciaban como primicias, subrayando el carácter de 'exclusiva' en su cuaderno.

Urkullu fue recibido a su llegada por José María Bergareche, presidente de El Diario Vasco, Iñigo Barrenechea, director general, y David Taberna, director del periódico. Con ellos fue conociendo los detalles de la nueva sede, de más de 3.500 metros, repartidos en tres plantas, con los medios tecnológicas más avanzados. Cerca de 150 personas trabajamos en este edificio que sustituye a la histórica sede de Ibaeta.

El invitado conoció primero el DV Gunea, la gran sala de actos que quiere ser un espacio abierto a los guipuzcoanos, según subrayaron los anfitriones. De hecho ya lo es, porque diferentes foros y actividades han supuesto el paso de cientos de invitados, y varios más están en marcha para los próximos meses. En el DV Gunea se encuentran algunas de las obras artísticas de la colección del periódico, como la escultura que el propio Jorge Oteiza regaló a DV o un espectacular cuadro en tres dimensiones de Andrés Nagel. «Una de sus obras está en el jardín de Ajuria Enea y siempre llama la atención a los visitantes», contó Urkullu.

Luego llegó la visita a la Redacción. Esta vez era el lehendakari quien preguntaba y los periodistas los que respondían. El presidente del Gobierno Vasco preguntó a los redactores de la sección de Local por su cercanía con los lectores, a los de Deportes por el triunfo de la Real de la víspera en la Europa League, en Economía remarcó la satisfacción por la apuesta de Bayer por San Sebastián y en Cultura por los resultados de visitas de Hondalea, la escultura que él mismo inauguró hace un año.

Sonrió y comentó la jugada con los periodistas de Política, departió también con los redactores de la web y de la sección Al Día, y también con los encargados de los 'nuevos lenguajes' periodísticos. Y dio noticias. Ahora es aitona de un nieto pero vienen tres más en camino, dos de ellos gemelos. «Zorionak, lehendakari», le respondió Amaia Chico, responsable de la Edición Digital y Cierre, a quien reveló la buena nueva. Con el ejemplar del día entre las manos Urkullu consultó también detalles con el subdirector, Juanma Velasco; la jefa de Información, Arantxa Aldaz y el adjunto a la Dirección, Antxon Blanco.

Se demoró igualmente Urkullu en el recorrido por la segunda planta, donde trabajan los departamentos comerciales, administrativos y de eventos. Fue preguntando pormenores de la organización a Urko Barros, director de Control de Gestión, Jakes Agirrezabala, director comercial, y Eli Ugalde, directora de Marketing. Hubo anécdota: cuando el lehendakari supo que Ainhoa Velasco, del departamento Comercial, celebraba ayer su cumpleaños, le felicitó y posó para un 'selfie'. «Mejor que no te cante», bromeó.

El mandatario subió hasta la azotea del edificio, donde se divisan unas espectaculares vistas hasta la bahía de la Concha, Igeldo y el parque de Miramon. «Impresionante», repetía el invitado, que dejó una dedicatoria en el libro de firmas del periódico. «Gipuzkoa eta Euskadirako horren garrantzitsua den 'DV'-k kazetaritzan islatzen duen profesionaltasuna aitortuz, eskerrik asko!», escribió entre otras cosas.

Llegó luego el momento de la reunión. En la misma sala donde los jefes de las distintas secciones informativas se reúnen cada día con los rectores de la Redacción Urkullu se sentó con su cuaderno, tomando notas. Y confeccionó 'su' Primera, como se explica en las siguientes páginas.

A mediodía abandonó la sede. «Tenía una cita pendiente como lehendakari, pero ha sido un placer añadido como lector de periódico», se despidió.

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