Californiano y descendiente de la tribu Oneida

El ganador de la Clásica no es neoyorkino, sino que nació en Roseville (California). Su tribu la forman uns 25.000 miembros dispersos por Estados Unidos y Canadá y tienen idioma propio, aunque apenas lo hablan unas 200 personas. Powless no es uno de ellos.

Se estrenó en el ciclismo en carretera con 19 años -cumplirá 25 en septiembre- y ganó una etapa del Tour del Porvenir antes de dar el salto con el Jumbo-Visma en 2018. Formado en el Axeon Hagens Berman de Axel Merckx y amigo de Sepp Kuss, Powless no encontró su sitio en el equipo holandés y en 2020 decidió fichar por el EF, donde confiaba poder sacar a relucir sus características en un entorno más cercano culturalmente y con métodos de trabajo que asimila mejor. En 2018 corrió la Vuelta al lado de Primoz Roglic y los dos últimos ha sido incluido en el ocho del EF en el Tour.

De hecho, no estuvo lejos de debutar con el EF, ya que incluso había firmado con el equipo americano para a la temporada 2018, pero la formación no tenía el futuro asegurado y le liberó del compromiso.

Su hermana mayor, Shayna, de 27 años, es también ciclista. Su madre, Jen Allred, disputó el maratón de los Juegos Olímpicos de Barcelona en 1992 defendiendo la bandera de Guam. Su padre era miembro del ejército del aire estadounidense y competía en Ironmans. Ganó pruebas del circuito de triatlón para militares.

Con 1,83 de estatura, Powless se ha destacado hasta ahora en el campo profesional por su capacidad para coger escapadas. Su palmarés estaba vacío hasta ayer y tampoco abundan los puestos de honor, más allá de dos top-5 en etapas del Tour del año pasado. Con 24 años y cuatro campañas en el World Tour, su carrera puede dar un vuelco tras la victoria de ayer.