Calurosa bienvenida a la nueva cosecha

El municipio, como todos los años, se vuelca con una fecha que es importante, ya que marca la recogida de la manzana y el comienzo del trabajo en los lagares, que finaliza con la presencia de la sidra en las kupelas a principios de año. Esta etapa, vital para las sidrerías, desde hace unos años se ha convertido también en un reclamo para visitar Astigarraga. De hecho, como destacaron ayer responsables tanto de Sagardoetxea como de Goldea Herri Kirol Batzordea,«hoy hay muchísima gente. Ya en la actividad de la recogida de sagarras en familia en el manzanal hemos tenido a más de 150 personas, el triple que el año pasado. Ha sido una pasada». Precisamente allí, en el Museo de la Sidra, arrancaba la fiesta con esa recolección de las manzanas que después se convertirían en el primer mosto de 2023.

Pero el epicentro de la jornada de ayer fue la plaza del Ayuntamiento. Allí no faltó la exposición y degustación de manzanas, hubo sidra y mosto de las sidrerías Alorrenea, Astarbe, Bereziartua, Gurutzeta, Petritegi, Lizeaga, Oiarbide, Txopinondo y Zapiain y venta de pintxos y productos de los caseríos locales. Los dantzaris de Astigar D.T. bailaron la 'sagar dantza' en Foru Plaza y también estuvo presente la kirikoketa.

Lo más significativo de la jornada fue que los asistentes pudieron disfrutar durante toda la mañana de la demostración en directo de cómo se trabaja en el lagar del caserío: los más pequeños de la casa pudieron recoger las manzanas con la kizkia en los cestos y estos se depositaron en el tolare para el proceso de triturado y posterior prensado. Tras todo ese esfuerzo, pasada la una del mediodía y tras el sonido de la música de la txalaparta, los allí presentes pudieron coger sus vasos y brindar con el primer mosto de 2023 «por la nueva cosecha».