Las instituciones aplauden la apuesta por la «igualdad» de un grupo de seguidores del alarde tradicional de Hondarribia

Las partes directamente implicadas en el problema del Alarde de Hondarribia fueron las más cautelosas a la hora de mostrar su reacción, aunque también lo hicieron, pero desde el resto de instituciones y organismos públicos expresaron sin demora su satisfacción por un posicionamiento que esperan que ayude a acercar posturas y a permitir que «Hondarribia disfrute su día grande y su tradición, enriqueciéndola y ofreciendo los mismos derechos a mujeres y hombres».

Fueron la directora de Emakunde, Izaskun Landaida -responsable de estas últimas palabras-; el portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka; el diputado foral de Cultura, Denis Itxaso; o el Ararteko, Manu Lezertua, quienes trasladaron su felicitación a este grupo de una nueva generación de hondarribiarras que, en su comunicado, pidió «cambios» acordes al siglo XXI, en el que «si una sola mujer de Hondarribia alberga el deseo de desfilar -sea de un modo u otro (cantinera o soldado)- en el Alarde, tiene todo el derecho a hacerlo».

Landaida consideró el mensaje «especialmente esperanzador» por proceder de la juventud. Y remarcó que Emakunde siempre ha defendido «que las tradiciones son importantes elementos de cohesión social de los pueblos pero tienen que adaptarse a los nuevos tiempos, al siglo XXI. Y es imposible hacerlo si no se respeta el deseo de muchas mujeres de la localidad de participar en igualdad de condiciones», aseguró antes de incidir en el diálogo.

En el mismo sentido, Erkoreka calificó de «buena noticia» que se «imponga la igualdad y la dignidad» en esta celebración y que se dé un paso «en la buena dirección». El diputado foral Denis Itxaso destacó el «coraje» de los firmantes del documento por «superar el miedo» y «dar un paso que muchas autoridades -dijo- no quieren dar. Y el Ararteko, por su parte, valoró la posición pública mostrada por este grupo -algunos participantes en el Alarde como soldados o cantineras y otros, seguidores- al considerar que su mensaje «expresa, de modo inequívoco, la evolución social hacia un modelo de convivencia festiva en el Alarde de Hondarribia en la que la plena igualdad de mujeres y hombres constituye sin duda un presupuesto irrenunciable». Según Lezertua, los sondeos realizados en los últimos años en la localidad «ya venían ofreciendo una imagen del creciente sentir» de su población «en favor del entendimiento, la convivencia pacífica y la integración» y confió en que «la incorporación de las mujeres al Alarde en condiciones de igualdad sea pronto una realidad normalizada y pacífica».

El Ayuntamiento de Hondarribia, implicado en la gestión de la fiesta y que contrató a una «facilitadora» para intentar acercar posturas, mostró su «total respeto» al comunicado de los jóvenes y a «su idea de crear una plataforma para tratar el tema del Alarde», aunque puntualizó que, por su parte, «seguirá trabajando como hasta ahora para mejorar la convivencia. Y en ese sentido, aludió al texto acordado por «todos los partidos» municipales el pasado 5 de septiembre, en vísperas de la última fiesta, en el que se constataba «que se han dado pasos» «en torno al conflicto» para «poder dialogar», y «se quiere agradecer los esfuerzos realizados a todas las personas que han participado en el proceso». Asimismo, se apelaba a «seguir por esta vía» de cara a las próximas ediciones del Alarde de Hondarribia.

Fuentes consultadas de Alarde Fundazioa trasladaron este martes también su «respeto» al mensaje de los jóvenes, «como a todas las opiniones», igual que «pedimos respeto a la nuestra», y mostraron su intención de aceptar la reunión solicitada por el grupo. No obstante, remitieron a una respuesta 'oficial' tras la reunión que tienen previsto mantener en próximos días.

Desde la compañía Jaizkibel, donde las mujeres pueden desfilar como soldado en el Alarde de Hondarribia, mostraron su «sorpresa» por la foto y el comunicado, aunque reconocieron que ya estaban «notando en los últimos años que los ciudadanos estaban cambiando, tanto dentro de Jaizkibel como fuera». Indican que en la última fiesta «se nos acercaba gente del Alarde a aplaudir y a vernos» y comparte con el Ararteko que «los ciudadanos de Hondarribia, -según esas encuestas no publicadas que mencionaba- quieren una solución. Queremos una solución, y el camino es el diálogo para asegurar los derechos de todas las mujeres en un único Alarde de Hondarribia».

. En este sentido, ha recordado que, tal y como se recoge en el texto que acordaron todos los grupos municipales el pasado 5 de septiembre, «con este objetivo se han dado pasos junto a diferentes agentes en torno al conflicto creado en relación con el Alarde de Hondarribiapara poder dialogar« y ha agradecido «los esfuerzos realizados a todas las personas que han participado en este proceso». «Los partidos que conformamos el Ayuntamiento estamos convencidos de que se tiene que seguir por esta vía», ha añadido el consistorio en la nota.

El diputado foral Denis Itxaso ha destacado a través de su cuenta de Twitter el «coraje» de los firmantes del documento por «superar el miedo» y «dar un paso que muchas autoridades -dijo- no quieren dar, para «actuar como personas del siglo XXI».

También el Ararteko ha mostrado su satisfacción por el manifiesto, al tiempo que ha considerado que expresa la «evolución social» hacia un modelo de «plena igualdad».

El Ararteko ha señalado en un comunicado que la postura de estos jóvenes es «positiva». Ha indicado que «los sondeos y las encuestas» realizados en años anteriores ofrecieron una imagen del «creciente sentir de la población de Hondarribia en favor del entendimiento, la convivencia pacífica y la integración» en esta fiesta de «hombres y mujeres por igual».

La institución que dirige Manu Lezertua afirma que esta «imagen dista mucho de la expresión radical de los plásticos negros» de los contrarios a la participación de la mujer como soldado «sostenida por quienes rehusaban aceptar la transformación que ha conocido la sociedad hacia la consecución de la igualdad plena», señala.

El Ararteko ha mostrado su esperanza en que esta «manifestación de cambio auspiciado por la juventud» haga que la incorporación de la mujer en el Alarde de Hondarribia «sea pronto una realidad normalizada y pacífica».