Titare, con Arantxa Comontes, reabre a partir de las 19.00 horas

Arantxa Comontes Oria, es una mujer joven y emprendedora que no está dispuesta a quedarse cruzada de brazos a ver pasar trenes. Hace 8 años abrió una tienda de lencería en la calle Labeaga tras pensar bien qué enfoque dar a su negocio, una apuesta arriesgada, que al ser mujer resulta mas dificil. Acertó en su planteamiento y se generó una buena clientela. Los tiempos cambian y requieren de más producto, mejor exposición y más espacio. Lo encontró a dos pasos en la misma calle Labeaga, donde estuvo electrodomesticos Ederrena.

Arantxa es una mujer con coraje que se emociona cuando le pedimos que nos diga a quién tiene que dar las gracias. Interrumpimos la grabación, se serena y nos dice que a su marido, Aingeru, y sus padres, Gema y Jesús, y por supuesto a toda la clientela que apoya su propuesta. Clientela a la que le va a agasajar esta tarde a las siete, en la inauguración del nuevo establecimiento.

Arantxa nos reconoce que no son tiempos para la poesía, no se lo han puesto nada fácil, han tardado lo que han querido, pero no se ha desanimado y ya está en su nueva etapa, pese a la fiscalidad ferrea del ticket bai, pese a la burocracia, pese a las dudas e incertidumbres.

«Tenemos que ser valientes –explica–, siempre he pensado que tiempo para perder en esta apuesta ya hay, el no, lo tengo, pero lucharemos por el sí, no nos arrugaremos».

Asi pues hoy, a las siete surge una nueva propuesta, ampliada, tras meses de ver cómo se cierran los comercios. Zorionak.

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