Cruz Roja quiere abrir a más municipios del Alto Deba el apoyo escolar a niños vulnerables

Los servicio sociales son los encargados de identificar a los participantes potenciales en el proyecto, el consistorio bergarés cede un local para el desarrollo de las sesiones semanales a caro del voluntariado.

La propuesta está dirigida a niños y niñas de entre 8 y 12 años en situación vulnerable que estén cursando de tercero a sexto de educación primaria. «El apoyo se da en edades tempranas en las que buscamos asentar unas bases para una mejor consolidación del desarrollo del lenguaje y pensamiento matemático, así como trabajar sus capacidades emocionales y afectivas, con el objetivo de impulsar su potencial de desarrollo personal y académico», apunta Elena Ibarrondo, voluntaria de Cruz Roja en Alto Deba y coordinadora del proyecto.

Los participantes llegan al aula facilitada por el Ayuntamiento en la sede del Hogar del Jubilado, en Boni Laskurain, y quedan al cargo de Cruz Roja, «primero meriendan mientras comparten un rato de conversación, y después trabajan con los deberes que puedan traer del colegio. Los días que no hay deberes, los voluntarios de Cruz Roja tienen material preparado para realizar tareas de refuerzo, siempre en estrecha coordinación con los servicios sociales municipales, el profesorado de sus colegios y las familias», destacan desde Cruz Roja.

El programa está orientado a responder a otras necesidades, «nos esforzamos en dar una respuesta muy personalizada en función de las necesidades de cada participante», detalla Ibarrondo, y añade «siempre dedicamos un tiempo para jugar en grupo porque, además de aprender, intentamos responder también a las necesidades afectivas que muestran. Los y las jóvenes participantes vienen a estas sesiones alegres y motivados porque empiezan con una merienda, aprenden y resuelven los deberes, y juegan un rato todos juntos en un entorno de confianza».

Inciden en que el proyecto dista mucho de ser unas clases particulares al uso ya que, además de ofrecer un refuerzo académico, se centra en otros muchos aspectos como la higiene, la alimentación, el dominio del idioma, y otros, «también dedicamos tiempo a escucharles porque creemos que es muy importante saber cómo se sienten para poder ofrecer esa ayuda que cada uno precisa», indica Ibarrondo.

La adecuación al uso de nuevas tecnologías es uno de los objetivos porque muchos contenidos pedagógicos se trabajan hoy en día en los colegios en ordenadores y tabletas, «algunos participantes que se han incorporado este año han requerido ser equipados con tabletas. Hemos podido responde a esta carencia gracias a una subvención del ayuntamiento de Bergara».

La cuarta edición en la villa está atendida por de 8 voluntarios que se coordinan entre para las sesiones semanales. Como destaca el voluntario Jose Angel Amasorrain, «en un proyecto así, no tiene precio lo que recibes al contribuir a aligerar la mochila que traen estos jóvenes. Te das cuenta de las barreras idiomáticas y culturales que tienen que superar, y en eso también les podemos ayudar».

Esta acción solidaria se desarrolla sólo en Bergara y Cruz Roja quiere extender la actividad a otras localidades de la comarca en la medida en que nuevas personas voluntarias quieran involucrarse y desarrollar el proyecto, «tienen una parte del camino recorrido porque disponen de la experiencia pionera de Bergara»

Los interesados en colaborar con esta propuesta y las otras actividades que lleva a cabo Cruz Roja en Alto Deba pueden entrar en contacto en la sede del barrio de Elorregi (San Prudencio ), en el teléfono 943 76 55 76 o a través del correo electrónico altodeba@cruzroja.es.