Muere una mujer de 68 años atropellada en un polígono industrial de Arrasate

Hasta el lugar del accidente se desplazaron agentes de la Policía Local, Ertzaintza y servicios de emergencia, quienes no pudieron hacer nada para salvar la vida de la mujer. Las autoridades policiales acordonaron la zona para esclarecer las circunstancias del atropello. También se personó el juez para el levantamiento del cadáver, que se produjo sobre las 13.15 horas.

Tanto desde la Policía Municipal como desde la empresa IFAM, frente a cuya fachada sucedió el atropello mortal, subrayaban la «excepcionalidad» del accidente que ha costado la vida de la mujer. Fuentes consistoriales también señalaron que se ha tratado de un hecho «aislado» que se ha producido en una zona del polígono industrial A-20 que «no entraña especial peligrosidad para peatones ni conductores» y que carece de consideración de «punto negro». Se trata de una vía urbana con limitación de velocidad a 30 kilómetros por hora.

José Luis Eraña, gerente de IFAM desde hace siete años, atestiguaba que «ni los más veteranos trabajadores» de la empresa «recuerdan que se haya producido ningún accidente en esta zona en los últimos veinte años. Nunca hemos visto que haya sucedido nada parecido a lo ocurrido hoy». Eraña explicaba a este periódico que la furgoneta de reparto que atropelló mortalmente a una mujer «acababa de salir de entregar un paquete en nuestra empresa. Se ha cerrado la barrera y ha salido. Desconocemos en qué circunstancias se ha producido el atropello», relataba este directivo que insiste en lo «inusual» de la presencia de personas transitando por la acera situada delante de la fachada de la empresa. «Se trata de una zona de estacionamiento que casi exclusivamente utilizan los trabajadores de IFAM». Más allá del personal de la empresa, «no pasan apenas transeúntes por esta acera» aseguraba Eraña. El tránsito peatonal discurre en su inmensa mayoría por la acera contigua al río Deba, mucho más amplia y situada al otro lado de la calzada.

Respecto al tráfico rodado que circula en la confluencia del puente de Osiña con el enlace de la variante de GI-627 y ramal que va al hospital, José Luis Eraña aseguraba que «en un 80 por ciento» ese tráfico discurre por la calle Osinaga. Solo un «residual 20 por ciento» circula por la calle Notario Etxagibel y por el punto donde se ha producido el atropello mortal».

Este testimonio corrobora lo indicado por la Policía Municipal en el sentido de que en el lugar del accidente la intensidad del tráfico es relativamente baja, y se trata de una zona industrial que carece de consideración de zona peligrosa ni acumula precedentes de accidentes o atropello previos.

La de Arrasate es la sexta víctima mortal en el territorio este año y la segunda mujer que muere atropellada después de que el 1 de febrero una mujer perdiera la vida en Eibar tras ser arrollada por un autobús interurbano. De esas seis, cuatro pertenecen a colectivos vulnerables –también un motorista y un ciclista–. Además, es la tercera víctima en apenas dos semanas y media tras los fallecidos en los accidentes en Zumarraga y Zumaia.