El Transcantábrico incluye a Donostia en su ruta a partir de hoy

Recorre los raíles de viejos trenes hulleros que llegaban de León a Vizcaya, aunque desde hoy, Donostia se convertirá en punto de partida y de llegada. En el andén 2 de la estación de Amara, a las 16.50 de la tarde, el Transcantábrico llegará a San Sebastián e incluirá por primera vez a la capital donostiarra en un recorrido que comenzó su andadura en 1983 y que sigue la estela de viajes que abrió el Orient Express.

Desde entonces discurre por las mismas vías que el histórico Ferrocarril de la Robla, en un viaje de ocho días y siete noches que recorre el borde del Cantábrico, un crucero ferroviario por el Camino de Santiago que atraviesa localidades como Oviedo, Ribadesella, Llanes, Santillana, Carrión de los Condes, Luarca, León... Además de la propia capital compostelana.

Un convenio entre FEVE y Euskotrenbideak ha permitido la llegada de este tren turístico a Donostia, tras las gestiones realizadas por el departamento de Transportes del Gobierno Vasco para que el trayecto no concluyera en Bilbao.

El viceconsejero, Ernesto Gasco, explicó que se ha considerado importante llegar hasta Donostia para potenciar el papel de la ciudad. El departamento tenía el objetivo de que posibles dificultades técnicas no impidieran que la capital guipuzcoana se incluyera dentro de una ruta histórica y de carácter romántico como esta.

«Se implanta un nuevo producto que puede servir para potenciar el papel de la ciudad y su candidatura a capitalidad cultural, además de para dinamizar tanto el turismo como el comercio».

El primer itinerario clásico es el Donostia-Santiago de Compostela. Sale el sábado para atravesar el domingo Bilbao hacia Santander. El tercer día se llega a Cabezón de la Sal, desde donde el cuarto se llega a Arriondas, el quinto a Gijón, el sexto a Luarca, el séptimo a Viveiro y el octavo a Santiago de Compostela. Se pude hacer también a la inversa.