El PNV califica de «sucio y caduco» el PaP y defiende los contenedores

Más de treinta cargos públicos del PNV de Gipuzkoa apoyaron ayer con su presencia el lanzamiento de la iniciativa 'Gipuzkoa Garbia', la propuesta con la que la formación jeltzale responde «a la imposición por parte de la Izquierta Abertzale del PaP como sistema de recogida de basura de nuestras calles, sin dar la palabra a la ciudadanía».

Más allá de algún matiz terminológico, el documento -cuyas líneas generales adelantó ayer este periódico-, no modifica la posición del PNV en la materia, que sigue siendo la que se recoge en el Plan Integral de Gestión de Residuos Urbanos de Gipuzkoa 2002-2016 (PIGRUG). El documento, como se recordó en varias ocasiones en el curso de la comparecencia de los cargos nacionalistas, «sigue vigente y Bildu lo está modificando» con su estrategia, basada en el puerta a puerta y el rechazo a la incineradora.

Así, en consonancia con el Pigrug, prevenir, reciclar, compostar y reutilizar se mantienen como los principios básicos de la estrategia del PNV en lo que respecta a la gestión de residuos urbanos. Donde no se llegue con esas alternativas, se procederá a «la valorización energética mediante la incineración de aquellos residuos que no se pueden reciclar».

Lo mejor, los contenedores

El PNV exige también «el cierre inmediato de los tres vertederos de residuos urbanos existentes en Gipuzkoa», ubicados en Azpeitia, Beasain y Zarautz y cuya clausura está prevista para 2015 en el plan de residuos de Bildu, y se opone a la apertura de los nuevos vertederos que prevé ese mismo plan.

En la presentación del documento, que fue leído en euskera por la concejala pasaitarra Nahikari Otermin y en castellano por Imanol Lasa, edil de Zarautz, no se aportaron detalles concretos sobre las soluciones que se esbozan en un texto que no llega a los tres folios, pero queda fuera de toda duda que, a juicio del PNV, con «una correcta gestión de los contenedores y una participación voluntaria de los ciudadanos se pueden coneguir mejores resultados que con el sistema PaP», que califican de «sucio y caduco». «Apostamos por el sistema de contenedores como la mejor forma de avanzar en un sistema de recogida selectiva basada en el reciclaje sostenible», se afirma en el documento, recordando que «las innovaciones planteadas» están mejorando el sistema de contenedores.

El PNV está convencido de que también desde la óptica económica tiene ventajas el sistema de recogida basado en los contenedores, y no solo porque el PaP es «caro», sino porque «durante los últimos años se ha realizado una importante inversión en logística, transporte y recogida» que resultaría estéril si se optara por un sistema distinto al de los contenedores que, además, requeriría nuevas inversiones.

Contra las «imposiciones»

En cualquier caso, la propuesta no desarrolla demasiado los aspectos técnicos que, desde el «máximo rigor y transparencia» y «para «poner freno a la mentira y demagogia existentes en torno al tratamiento de basuras», serán dados a conocer a los guipuzcoanos a través de acciones informativas de las que «se darán detalles en los próximos días».

El documento que ha servido para lanzar 'Gipuzkoa Garbia' se centra en cuestiones de otro cariz, y acusa a la izquierda abertzale de ignorar que «la sociedad guipuzcoana ha demostrado ser lo suficientemente madura y saber gestionar correctamente sus residuos sin necesidad de establecer sistemas de recogida selectiva basados en la imposición». «Siendo la gestión de residuos una problemática que atañe a toda la sociedad, sería un error tratar de darle solución sin contar con ésta», insiste. «Rechazamos la consideración de minoría de edad de la ciudadanía y la instrumentalización política de esta cuestión», recalca.

Un aspecto de índole claramente política, sin embargo, se está convirtiendo en el nudo gordiano de un debate cuyos principales protagonistas se volvieron a afianzar ayer en sus posiciones a través de varias comparecencias públicas: a quién compete tomar las decisiones en materia de «planificación del sistema de gestión de los residuos», una cuestión clave teniendo en cuenta que, en función de la composición política de las dos instancias en liza -las Juntas Generales y el Consorcio de Residuos-, cabría esperar resoluciones opuestas.

Al PNV no le cabe ninguna duda, y asegura que «según lo que dice na normativa vigente, corresponde a las Juntas Generales de Gipuzkoa». «No concebimos que Bildu no respete la decisión que adopten las Juntas Generales», añadieron, anticipando que aportarán más detalles sobre su propuesta el próximo miércoles en el parlamento foral de Gipuzkoa.