La casa del fotógrafo

AFI, así con mayúsculas, es lo mismo que decir Asociación Fotográfica Irunesa. Se puso en marcha a finales de la década de los setenta. José Javier Espinal y José Mª Castillo le dieron la marcha suficiente que, con el paso del tiempo, cobró continuidad en nombres como los de Manolo Nieto, Miguel Salaverria, Fernando Andrés, Santi Herrero, Fernando Baudín (apostó por la fotografía como actividad profesional), José Miranda y Orlando Fernández. Como se aprecia, poco a poco se fueron incorporando hondarribiarras a la entidad irundarra.

En la actualidad, las riendas de AFI están en las buenas manos de su presidente, Gerardo García; y en las de sus directos colaboradores: Miguel Salaverria (vicepresidente), Mikel Prado (secretario), Luis Laínsa (tesorero), además de los vocales Andrés Indurain, Jesús Hernández, José Antonio Santos, Izaskun Sagarzazu, Joaquín Merino, Itziar Villar y Tomás Bravo.

Pues bien, esta junta directiva pasará a la historia de AFI como la que inauguró el nuevo local social, que se encuentra en la calle Izaga, 7 bajo. Este espacio sucede a los anteriores, esos que funcionaron en las Antiguas Escuelas del Juncal (hoy, Museo Oiasso) y en el sótano del número 2 de la calle Fueros.

Los actos de la inauguración fueron muy majos, empezando por el aurresku que bailó Enekoitz Urtxegi. Lo hizo al compás que marcaba el txistu de Daniel Bereau. Luego se proyectó un audiovisual elaborado por Jesús Martínez, con fotos de los socios. Tomás Bravo y Luis Pérez fueron los ayudantes técnicos. Otra muestra de fotos de las distintas ediciones del 'Ciudad de Irun' enseñó una selección de Mikel Prado, Andrés Indurain, Izaskun Sagarzazu y Tomás Bravo, que está en todas. Jesús Hernández ofició como jefe de reporteros del acto.

Un nuevo paso al frente de la asociación, que viene de enseñar el local en su inauguración. Y lo estrenaron unos cuantos. Por el Ayuntamiento, José Antonio Santano, Goizane Álvarez, Fernando San Martín, Juana de Bengoechea y Belén Sierra. Desde Bilbao llegó Juan Armentia, presidente de la Federación de Agrupaciones Fotográficas del País Vasco; de Donostia, Julio Tejadas, Txaro Barinaga, Fernando Anza y Juanjo Alonso; y desde Hendaia, de la sociedad hermana, Michel Dhers, acompañado de Alazne Hadouelhadj (¡toma apellidito...!).

Luego, el resto ya eran como de casa, incluídas las nuevas 'vecinas' de AFI que son Garbiñe Etxenagusia, Mertxe Irazu y Koro Lertxundi. Todas de Soinu Taldea Txorimaloak, ente que sabe todo sobre la 'triki'.

En el grupo principal, Tomás Maeztu (Mugan), Pedro Arnedo (Cofradía del Salmón), muy cerca de Jotaerre Garmendia y de Maialen Arocena, la autora del mural que manda en la fachada del local. Con Maialen, sus aitas, José Antonio 'Talo' Arocena y Ana García, así como muy orgullosos.

Fuera del local me encontré con tres pequeñajos muy vitales. Son, sin duda, el futuro de AFI. Uno era Haitz Urtxegi, hijo de Enekoitz y de Garoa Lekuona. La criatura no dejó de jugar con Eider Domínguez y Mayi Urtxegi, algo mayores que él.

Dentro del batallón de críos, Irina Ruiz de Angulo Omelyanenko, hija de Aitor y Svitlana, esa moza ucraniana que tantos zuritos me sirvió en el 'Edurne'.

Cerraba el trío Danel Villarrubia Sagarzazu, que llegó a este mundo gracias a la atinada intervención de Izaskun y Aitor.

Ya dentro del local, Maite Cortina Crespo (saludos para Conchi) charlaba animadamente con Nicolás Silva, al lado de Roberto Martínez, el marido de Marisol Muñoz (A. VV. Santiago).

Y ya, la larga lista de socios. A muchos les identifiqué por las fotos que se exhibieron. Son los casos de Joaquín Merino, Luis Irisarri, Maxi Alonso o José Córdoba, que se nos acaba de jubilar.

Más socios como Ángel Irazabal, Begoña Dárceles, Castor Telletxea, Igor Silicio, Soraya Pérez, Sonia Zubeldia, Mertxe Morales, mi amiga Miren Ercibengoa, Montse Coca, Javi Hernández, Javier Redondo, Xabier Etxeberria, Xabier Arribas, Txomin Lazkano o Tomás Flores. También saludé a mi colega Rafa Herrero, periodista de la Agencia EFE y gran fotógrafo. Entre los dos le mandamos vía aérea, un cariñoso saludo para Maider Izeta (también de AFI) que sigue en Los Ángeles, como uno más.

Habló Gerardo García y también el alcalde. «Las cosas grandes se hacen esperar un poco, pero la espera ha valido la pena», Santano dixit.

El último acto del protocolo tuvo que ver con el espléndido lunch que prepararon otros dos socios de AFI: José Miranda, conocido panadero; y José Antonio Santos. El personal dió muy buena cuenta de unas cuantas tortillas patateras y embutido variado.

Todo muy bien, todo muy bueno, un cojunto genial.