«Podemos llamar a los nacionalistas moderados y a la gente de izquierdas desencantada con Zapatero para que confíen en el PP vasco»
Iñaki Oyarzábal Secretario general del PP vasco. Defiende que los populares son «una garantía para que no se apliquen las políticas de Zapatero en el País Vasco, lo que sería un desastre»
ÁLVARO VICENTE
Domingo, 9 de mayo 2010, 05:22
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Sus abuelos eran de Oiartzun y de Azpeitia, pero Iñaki Oyarzábal es alavés. El secretario general del PP vasco considera que su partido ha dado estabilidad al Gobierno Vasco y que a partir de ahora, una vez cumplido el primer año de legislatura, es hora de «exigirle» al Ejecutivo porque «tiene las condiciones para hacer más».
- ¿Qué balance hace de este primer año de los socialistas en el Gobierno Vasco?
- Se han dado pasos al frente pero la realidad es que este Gobierno podía haber hecho más de lo que ha hecho. En demasiadas ocasiones el PP ha sido el que le ha tenido que empujar para impulsar las políticas de cambio.
- ¿Qué más podía haber hecho?
- En materia económica principalmente podía haber puesto propuestas mucho más concretas para salir de la crisis. Nuestro papel ha sido decisivo para que en el País Vasco no se reprodujeran los mismos errores que ha cometido Zapatero en la política económica en el conjunto de España. El PP ha sido el que le ha dado estabilidad al Gobierno Vasco. Quienes votaron al PSE y al PP en las últimas elecciones querían cambio y nosotros lo que le pedimos al Gobierno es que se atreva a cambiar las cosas, que tenga valentía para liderar las diferentes políticas y que no tenga miedo al que dirán los nacionalistas. El Gobierno tiene que atreverse a terminar con los chiringuitos de poder que el PNV tejió durante treinta años, una red que ha tratado de copar todo en el ámbito económico, político, social e incluso deportivo. Esa red de intereses y de poder hay que ir desmantelándola para regenerar la vida política.
- Pues cualquiera lo diría al escuchar la valoración que hizo el lehendakari López esta semana.
- Es que al Gobierno le ha faltado autocrítica. Se ha echado demasiadas flores.
- Queda claro que el PP vasco no comparte todo lo que hace este Gobierno.
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- Nosotros no damos un cheque en blanco a los socialistas. En el PP sabemos que tenemos que darle apoyo y lo ponemos en valor, pero no compartimos todo lo que hacen. El apoyo del PP es exigente y condicionado a que se hagan políticas distintas. El PP vasco ha conseguido reorientar la política de los socialistas en materia antiterrorista y además ha logrado, a través de los Presupuestos y de las propuestas que estamos sacando adelante, reorientar una política económica que ha evitado que aquí no se apliquen políticas de Zapatero que serían un desastre en el País Vasco. Los números ahí están.
- ¿Ha calado entre los vascos ese mensaje de que el PP es una garantía en lo económico como dice?
- Mucha gente no confía en el PP en determinados asuntos pero sí saben que tenemos mejores recetas para superar la crisis. El PP es una garantía. Somos un partido que tenemos mucho que decir.
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- Si le digo que llevo muy mal el reproche entre partidos y las pocas ganas de colaborar que demuestran los unos con los otros.
- El PP vasco está dando muestras de que ha hecho una reflexión. Pensamos que lo mejor para este país en este momento es que todos rememos en la misma dirección y nosotros estamos tratando de hacer del PP un partido más abierto, tratando de tender la mano a otros partidos. Queremos poner el acento en aquellas cosas que nos unen a los demás y dejar a un lado las cosas que nos separan. En este sentido creemos que es importante que el PNV y otras fuerzas políticas busquen un discurso moderado como nosotros estamos haciendo.
- ¿Por qué ha puesto el acento en el PNV?
- Porque esta semana hemos visto como el PNV de Egibar está empeñado en radicalizar su discurso con ese llamamiento a que las empresas vascas no vendan en España. Buscar el enfrentamiento de forma gratuita hace daño y no ayuda.
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- ¿Ha reconducido el PP sus relaciones con el PNV?
- Ahora están mucho mejor. Existe una relación razonable y fluida. Lo que queremos es entendernos con un PNV moderado que apueste por el sentido común y lo que lamentamos es que a veces haga guiños a los más radicales con discursos que nos separan. Estamos haciendo un esfuerzo por el entendimiento y eso nos lo reconocen muchos vascos. Estamos intentando que se nos perciba como lo que somos, un partido que ha renovado a sus dirigentes, que está haciendo una reflexión profunda y que se quiere convertir en una referencia en Euskadi de moderación y eficacia. Queremos trasladar un proyecto con propuestas eficaces que puede llamar a muchos nacionalistas moderados y lo mismo a gente de izquierdas que están desencantados con la política de Zapatero. Creemos que podemos construir un proyecto en el que quepan todos. El PP tiene recorrido para crecer. Estamos haciendo una apuesta importante para llegar a cada uno de los ciudadanos vascos. Queremos incorporar a personas que antes no confiaban en el PP y ahora quieren darnos un voto de confianza.
Nuevo plan de educación
- ¿Está acotando el PP los márgenes de maniobra del Gobierno Vasco en la negociación del plan de educación con el PNV?
- No. Lo único que queremos es que se haga algo. Le pedimos al Gobierno que haga todo lo posible para buscar el máximo consenso posible pero que no se retrase su puesta en marcha ni se rebajen las exigencias de sus principios básicos. Nada más. A partir de ahí le hemos dicho que cuenta con el PP para ponerlo en marcha aunque algunos no quieran sumarse. Lo que no puede ser es que el desacuerdo de algunos impida avanzar.
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- ¿Por qué entonces el retraso?
- Eso habría que preguntárselo al PNV. Lo que queremos es que nos digan cuál es su problema. El nuevo plan de educación para la paz es algo urgentísimo que hay que poner en marcha cuanto antes. La realidad es que el Gobierno anterior no ha hecho nada. En la educación vasca se han puesto en marcha planes transversales de educación para la convivencia similares a los de cualquier comunidad del resto de España. Euskadi vive una situación muy distinta con una legitimación del terrorismo por parte de un sector que es necesario combatir. Algo ha fallado cuando el último informe del Ararteko recoge que un 15% de los jóvenes justifica la violencia de ETA y hasta un 30% justifican el asesinato en determinadas circunstancias. Ahí la administración tiene la obligación de actuar.
-¿Saldrá adelante?
- Sí. Hay terreno y recorrido para el acuerdo, y lo normal es que se ponga en práctica en el próximo curso.
- ¿Con el respaldo del PNV?
- También con el PNV. Hay una parte de ese partido que entiende que esto es lo que hay que hacer y nosotros debemos ayudar a que se imponga la sensatez frente a los que dentro del PNV hacen guiños a los radicales o hacen llamamientos para que los ayuntamientos pongan placas en rechazo a la bandera española como ha hecho la Diputación de Gipuzkoa esta semana. En lugar de buscar el entendimiento, tenemos al diputado general provocando el enfrentamiento y distrayendo la atención en lugar de ocuparse de los problemas de los guipuzcoanos.
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