La mitad de los casos del foco de Ordizia, que suma 48 positivos, son vecinos de otras localidades

El foco detectado en Ordizia el fin de semana ha pasado a convertirse en un rebrote del virus con transmisión comunitaria, después de confirmarse ayer que los casos vinculados al mismo suman ya 48 y que Salud espera que se conozcan nuevos positivos en los próximos días. Un foco que ha traspasado las fronteras del municipio, ya que en torno a la mitad de los casos estarían localizados en otras localidades e incluso territorios. Ante esta situación, Osakidetza emitió ayer una orden con una serie de medidas restrictivas aplicables solo en Ordizia, que contemplan la obligatoriedad de llevar mascarilla y la limitación de aforo y horario en los establecimientos hosteleros del municipio. Medidas que se suman a las que ya tomó el lunes el Ayuntamiento, como el cierre de los parques infantiles y de los edificios públicos.

Desde que el sábado se localizara un foco con siete personas contagiadas por Covid-19 en la zona hostelera de la calle Etxezarreta, los casos han ido aumentando. Salud cerró el pub Sarri, donde se piensa que estuvo el origen epidemiológico del brote, y el domingo hizo lo propio con locales cercanos como el Miami, el Haka y el Kebab. Se realizó un llamamiento a la población para acudir a realizarse una PCR en caso de haber frecuentado estos establecimientos y el mismo lunes se instaló una carpa donde en apenas tres días se han realizado cerca de 2.000 test.

Hasta ayer se conocía el resultado de 1.692 pruebas, en las que se han detectado 28 positivos, nueve más que los que se conocían hasta el martes por la tarde. Estos, sumados a los siete casos de origen y los detectados entre sus contactos estrechos, elevan ya a 48 los positivos, tal y como confirmó la consejera de Salud, Nekane Murga. «Estamos detectando algunos casos positivos fuera del 'screening' -el rastreo de contagios mediante pruebas PCR-, por contactos cercanos de aquellos que han dado positivo», explicó.

Y la cifra seguirá en aumento, según las previsiones de Salud. Ayer quedaban por hacer cerca de 450 test a personas que habían pedido cita por haber estado en la zona del foco antes de que este se conociera, además de todas las pruebas que se están haciendo a los contactos más cercanos de las personas que ya han sido confirmadas con Covid. «Tenemos previsto que en las próximas horas aumente el número de contagios», reconoció Murga, aunque recalcó que «muchas son personas en aislamiento que les detectamos en la etapa más precoz de la enfermedad, y si esto sigue en esta línea no será necesario el confinamiento». Cabe recordar que la mayoría de las personas que han dado positivo están en la franja de edad de los 18 a los 35 años.

Una de las razones de evitar el cierre de Ordizia es que muchos de los casos detectados son de personas que no están domiciliadas en dicha localidad. La titular de Salud indicó que «en torno al 50% o algo más, aunque sin exactitud», son vecinos de la localidad, pero el resto de casos se han detectado en personas de otros municipios o territorios que estuvieron en la zona de contagio o que han tenido contacto estrecho con alguien contagiado. Hasta ahora lo único que se conoce es que habría casos en Álava, en Bizkaia y otro en Donostia, que fue la persona que dio la pista a Osakidetza sobre el origen del brote, al comentar que había tenido una reunión familiar en uno de los locales cerrados. Pero desde el Departamento de Salud no se ha dado más información al respecto. La comisión de seguimiento del brote volverá a reunirse hoy, una cita a la que se sumarán los alcaldes de Legorreta, Tolosa e Itsasondo. Estas dos últimas localidades registraron ayer dos casos positivos cada una, aunque Salud no quiso confirmar si su presencia en la reunión se debe a la relación de estos casos con el foco ordiziarra. Lo mismo ha ocurrido con dos positivos detectados en Idiazabal.

La consejería de Salud ha tomado una serie de medidas para evitar que la transmisión del virus se descontrole y ayer emitió una orden en la que impone el uso obligatorio de las mascarillas en todos los espacios públicos, tanto exteriores como cerrados, por lo que los ordiziarras deberán de llevarlas siempre puestas al salir de casa. El resto de medidas están enfocadas a restringir al máximo la actividad de ocio en el municipio, ya que, según la consejera, «los resultados de los test confirman que la transmisión» se ha producido en ese ámbito. Desde ayer el aforo en el interior de los establecimientos hosteleros se reduce a un 50% y solo se podrá consumir sentados, por lo que se suprime la atención en barra. Las terrazas mantienen el 100% de la capacidad aunque se deberá mantener la distancia de 1,5 metros entre mesas y personas no convivientes, una medida vigente en todo Euskadi. Estas medidas son aplicables a las sociedades y txokos. Además, se prohíbe la actividad en lonjas o locales para jóvenes, así como cualquier festividad o verbena. Salud devuelve así a Ordizia a una especie de fase 2.

Estas medidas se suman a las que el Ayuntamiento tomó el lunes, como el cierre de parques infantiles y de edificios públicos como la biblioteca y el polideportivo o la cancelación del tradicional mercado de los miércoles y de las actividades de udalekus. También se han prohibido las salidas de los usuarios de las residencias de ancianos del Goierri y, aunque se permiten las visitas, los vecinos de Ordizia, Beasain y Lazkao no podrán visitar a sus familiares en ningún centro de Gipuzkoa.