El cráter principal de la Cumbre Vieja, con sus tres grandes bocas, sigue erupcionando lava aumentando el caudal de la colada incandescente que llega hasta el mar.Apenas a unos 600 metros al noroeste de la cima del volcán las últimas dos fuentes magmáticas abiertas han creado dos ríos de fuego que confluyen en uno solo. Esta nueva lengua más fluida y veloz, sigue su inexorable rumbo hacia el mar aprovechando la topografía favorable. Casas que se salvaron de la primera colada en los barrios de El Paraiso y Alcalá, un polígono industrial y vecinos de La Laguna, temen ahora que sus propiedades queden sepultadas por la lava. Desde el buque del Instituto Oceanográfico se observa cómo una gran cascada de lava sigue precipitándose al mar. La actividad del volcán sigue siendo frenética y cambiante. Esta mañana un dron de INVOLCAN apreciaba una nueva boca en la grieta del volcán.-Redacción-
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