Solo dos de cada diez españoles reconoce sufrir estrés postvacacional

Tras un verano sin horarios, relajados, haciendo lo que nos apetece, es duro volver a la rutina, un proceso que requiere de una readaptación a las tareas laborales después de un largo periodo vacacional. Este paso puede desembocar, en ocasiones, en el llamado 'síndrome postvacacional' y cursa con un mayor cansancio o fatiga y un ánimo más bajo.

Pero, ¿de verdad o sufrimos tanto? Con la intención de conocer esta respuesta IMOP y Berbés Asociados han lanzado una nueva edición de la pregunta IMOP-Berbés.

Así, y según los resultados obtenidos, resulta que a pesar de lo que nos quejamos solamente dos de cada diez españoles sufre estrés postvacacional, mientras un 78% de la población reconoce que no lo padece. Por sexos, un 74% de las mujeres contesta que no sufren esta depresión, mientras que los hombres alcanzan el 82% .

De entre quienes sí lo padecen, destacan como principal síntoma el cansancio o la fatiga (6,5%). Otras de las señales que asocian al estrés postvacacional son el desinterés y la falta de motivación en el trabajo (4%) y la tristeza o nostalgia (4%), afectando más el primero a los hombres y el segundo a las mujeres.

En menor medida y con porcentajes más bajos, también se relacionan con ello otros aspectos como estrés y nervios, dificultad para conciliar el sueño, ansiedad y agobio, falta de apetito, distracciones, despistes y olvidos, irritabilidad y mal humor, y dolores musculares.

Como dato general, es importante destacar que la gran mayoría de estos síntomas afectan en mayor medida a la población comprendida entre 14 y 24 años, que es quien más dice sufrir la depresión postvacacional.