Roscón solidario

Solidaridad a bocados: «Es una cita obligada para ayudar a los más necesitados»

Cada 5 de enero, Cáritas Gipuzkoa recauda fondos para destinarlos a los más necesitados. En esta edición, la campaña está enfocada en el apoyo a «las familias que no pueden hacer frente a los gastos excesivos de la vivienda», cuenta Carmen Alba, miembro de Animación Comunitaria Cáritas. Para ello, 15 pasteleros y pasteleras artesanos de Gozoa elaboraron 1.500 raciones de roscón. «Siempre nos preocupa el hecho de tener que subir la cantidad de porciones, porque se venden todos los años», asegura Alba.

Aquellos que se acercaron para contribuir a la causa recibieron un 'pack' con «un trozo de rosco, una botella de zumo de Ekolo, un globo, una corona para los niños y un paquete de galletas, además de chocolate caliente al final de la cola hasta que se acabe», indicaba la responsable. La asociación había presentado un programa de voluntariado que Ander Prado conoció a través de un folleto, y decidió acudir ayer para «ayudar con los preparativos y pasar la mañana del domingo a cambio de un chocolate».

Algunos donostiarras llegaron pronto «para desayunar y ver la salida de los Reyes Magos», como Jon Urresti, que disfrutó de su ración con sus hijos en un banco de la plaza de Gipuzkoa. Para una familia de Egia el acto de Cáritas es «una cita obligada para ayudar cada año a los más necesitados». Cerca de las 11.30 horas y tras la salida de los Reyes, se formaron colas para recoger una porción de roscón mientras se organizó un corro para escuchar los cantos del Zarautzko Otxotea. Al terminar las canciones, los presentes comenzaron a bailar al ritmo que marcó la Helduen Dantzari Eskola de Andoain. Otros como el donostiarra Josean Castro y su pareja decidieron compartir una sola ración: «Ya llevamos mucho azúcar por la mañana», reconocía Castro.

Las hay quienes al pasar por allí a mediodía y ver el puesto aprovecharon para cooperar, como Josune Zenoz y sus amigas: «No sabíamos por qué estaban repartiendo los roscones, nos han llamado la atención las dantzas». Josune se guardó su trozo para el postre pese a las ganas de probarlo: «Ya que viene en una bolsa aprovecho y lo guardo para después», confesaba.