Las cabinas de la playa de La Concha, listas para reabrir

La operación no ha estado exenta de contratiempos. En un principio, la rehabilitación tenía un presupuesto de 450.000 euros, pero cuando comenzaron los trabajos sobre el terreno se pudo comprobar que el estado del forjado no era el más adecuado y que habría que impermeabilizar más superficie de la prevista. Esto obligó a ampliar el plazo de ejecución de veinte semanas, además de la partida económica, y trocear la actuación en dos partes para acompasar los periodos de obra y de baño.

El pasado ejercicio se dedicó precisamente a estas labores de acondicionamiento estructural, visibles desde el exterior del paseo. Hasta el mes de junio se acometieron las tareas para resolver el gran problema que afectaba a este equipamiento público: la entrada de agua al interior con dos orígenes distintos. Por un lado, las aguas pluviales que se filtraban a las cabinas a través de los lucernarios de pavés que había en el paseo de La Concha. Los trabajos consistieron en la eliminación de estos elementos y la impermeabilización de una gran superficie del paseo para acabar con el problema.

Por otro lado, se pretendía acabar con las inundaciones que se producían en los episodios de mareas vivas cuando estas coinciden con periodos de lluvia intensa y que provocaban importantes entradas de agua a los vestuarios porque el sistema de desagüe no era capaz de evacuar todo lo que recibía, según explica el concejal de Mantenimiento Urbano, Miguel Ángel Díez. Para ello, se ha construido un rebosadero en la arqueta de los soportales de manera que en el momento de un posible colapso de la red se proceda a realizar el vertido de las aguas pluviales directamente a la arena. Con la llegada de la temporada estival de 2022 se interrumpieron las obras para poder ofrecer el servicio a la ciudadanía, aunque todavía faltaba por ejecutar la segunda fase, la reforma interior, que termina justo ahora.

El edil del PSE detalla que se han instalado paneles de aislamiento térmico para mejorar el confort de los usuarios y reducir las condensaciones, se han sustituido pavimentos y acabados, se han reemplazado duchas y luminarias por otras que mejorarán la eficiencia energética y también se ha renovado el volumen acristalado de acceso a las cabinas desde el paseo.

Entre los detalles que mejorarán la experiencia de los bañistas de La Concha destacan los remates en paredes con paneles de materiales que imitan la madera y que hacen de las cabinas un lugar más confortable. Asimismo, los secadores de pelo han sido trasladados de sitio a una zona común para garantizar su correcto uso, ya que al parecer algunas personas aprovechaban el calor para secar bañadores y toallas en vez del cabello. El mobiliario interior estaba prácticamente nuevo de intervenciones recientes y ha sido reutilizado. Así, las taquillas y consignas seguirán siendo las mismas, lo que ha permitido un ahorro presupuestario considerable.

El horario de las cabinas es de 09.00 a 20.00 horas de junio a septiembre, con ampliación hasta las 20.30 horas los meses de julio y agosto. La última entrada a las instalaciones será media hora antes del cierre. Los precios de los diferentes servicios están disponibles en la web municipal. El acceso a las duchas cuesta 1,60 euros, el uso de taquilla y ducha 2,50 euros, la fianza de la pulsera de entrada son 6,5 euros y el préstamo de una toalla vale 1 euro. Hay bonos de diez usos por 15 euros y de veinte por 28 euros. Para toda la temporada de verano, el precio asciende a 75 euros.

En los primeros días de la campaña no funcionarán los tornos de entrada, ya que ha habido complicaciones con el suministro de las máquinas, por lo que el control de accesos se realizará de forma manual por parte del personal municipal.