God save the Real

La primera parte que hizo el equipo blanquiazul fue majestuosa. No concedió ningún tiro a puerta a todo un Manchester United. Ese que había pasado por encima del Liverpool, el mismo que se había deshecho del Arsenal cuatro días atrás. Alguna escaramuza, un par de carreras y el habitual ansia de Ronaldo de hacer gol. El de Madeira lo busca como Indiana Jones el Santo Grial. La Real con más poso de la historia, por detrás por supuesto de la campeona, ni se inmutó ante el equipo más rico del mundo. Y a partir de ahí forjó un triunfo que es histórico. Lo será la fecha de ayer porque el Reino Unido y la Commonwealth pasan a tener rey después de 70 años. Como su nombre indica, la Real reinó en Old Trafford.

Advirtió Imanol que el equipo iba a ser valiente. Lo fue a medias y ahí estuvo la clave. Hubiera sido un suicidio ir como la brigada ligera a la batalla de Balaklava cargando contra la artillería enemiga en Crimea. Sí salió a por el United pero 'piano, piano'. Atrás el equipo estuvo impecable, con cinco líderes, como reclama Remiro. Todos los que tiene la defensa. Y a partir de ahí el equipo fue creciendo. Hubo que esperar hasta que llegaron fases de dominio. El equipo de mil millones de euros parecía el que jugaba de negro. De luto por su Majestad pero con el corazón blanco y azul como el de los mil fieles que no olvidarán el día de ayer.

Pasarán los años y seguirán cantando lo que se escuchó en Old Trafford. Recordarán las pintas de Shambles Square, el gol de Brais, las carreras de Aihen, las acciones de Pacheco y Aritz, los 'uys' de Kubo, Sorloth y Cho, y el aplauso final de todos. Podemos ser primeros de grupo. Ya no es una quimera. Tenemos tres puntos más que el United. God save the Real!!