La Real Sociedad, en su mejor momento
En el segundo palo ·
El primer equipo, en Europa; el filial, en la fase de ascenso a Segunda, el equipo femenino, en la parte alta...Azúcar. Miel. La Real Sociedad vuela. El viento sopla de cola porque hoy el equipo está más cerca de lograr un billete para ... la Europa League. Un éxito en toda regla. Todavía más por hacerlo dos cursos seguidos, algo muy difícil de conseguir. Lo hizo en las temporadas 74/75 y 75/76, posteriormente en los años gloriosos desde 1979 hasta 1983 y por último en las campañas 87/88 (Recopa) y 88/89 (UEFA). Nunca más en su centenaria historia.
Publicidad
Pero no me quiero parar ahí porque el éxito va más allá del primer equipo. La salud deportiva de la Real está en máximos. Como nunca. El filial, con Xabi Alonso al frente, está a dos partidos de jugar en Segunda División. El Sanse ha tenido que hacer encaje de bolillos todas las semanas para sobreponerse a lesiones y contactos estrechos por Covid, su juego ha ido de menos a más y ha alcanzado su mejor versión en estas últimas semanas. Más no se puede pedir a un grupo que encaraba una temporada de transición por la juventud de su bloque y que ahora puede hacer que la Real sea uno de los pocos clubes que juega en Primera y en Segunda. El reto económico y deportivo en el que puede meterse la Real con el equipo en Segunda es de aúpa, pero eso ya llegará, si es que llega.
Al buen momento del primer equipo y el Sanse se suma el Tercera que entrena el exjugador Sergio Francisco. Está a un punto de la fase de ascenso empujado por los goles del artillero Karrikaburu.
Y qué decir del equipo que dirige Natalia Arroyo. Ha estado peleando toda la temporada por la tercera plaza que da acceso directo a la Liga de Campeones con un equipo que se parece muy poco, poquísimo, al que hoy hace dos años ganó la Copa en Granada. La Real va a acabar delante de proyectos formados a golpe de talonario como el Atlético de Madrid o el Sevilla y muy cerca en juego del Levante y el Real Madrid, dos de los tres que le preceden en una Liga en la que el Barcelona juega a otra cosa.
Los resultados respaldan a esta Real dirigida por Roberto Olabe y el consejo de administración que le respalda. Él ha dado la vuelta al calcetín.
Pero más allá de ganar o perder, me quedo con la forma de hacer y ser de esta Real, desde el primero al último. No hay una mala palabra de Imanol o Natalia Arroyo hacia los árbitros ahora que solo se habla de ellos en Madrid. El comportamiento de las dos plantillas en el terreno de juego es ejemplar, sin engañar a los colegiados y siempre con respeto hacia el rival. No me imagino a los nuestros organizando una barbacoa como la de Messi saltándose la normativa. ¿Alguien se imagina a Imanol en el verde pidiendo explicaciones a los árbitros al acabar el partido como hizo ese 'técnico ejemplar' llamado Zidane? Eso vale mucho mas que los títulos o la clasificación europea. Las cosas pasan por algo.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión