Habitación individual, novelas, series y consolas en la 'burbuja' de la selección de España

Después de 3.179 minutos en 43 partidos jugados con la Real Sociedad, 39 de ellos como titular, a Mikel Oyarzabal le ha llegado el momento de debutar en un gran torneo con la absoluta. Será el décimo realista que lo haga desde que Arconada, Diego, Zamora y Satrústegui jugaron la Eurocopa de 1980 en Italia. Después les llegó el turno a Bakero, Txiki Begiristain, Aranzabal, Xabi Alonso, Westerveld, Karpin y Sa Pinto. A ellos se suma Isak.

El capitán de la Real asume con naturalidad este reto, lo mismo que acepta sin rechistar no poder salir de la 'burbuja' en la que están metidos los jugadores, técnicos y empleados de la selección en el tiempo que dure esta Eurocopa.

Mikel Oyarzabal no se ha llevado la cama a Las Rozas como sí ha hecho Marcos Llorente para tratar de descansar como si estuviera en su domicilio. El realista, que no hace tanto compaginaba el deporte con sus estudios en la Universidad de Deusto, ha cargado en la maleta novelas para pasar las horas muertas que quedan entre los entrenamientos y partidos, además de un buen número de series de televisión. Cada jugador ocupa una habitación.

La idea es que los jugadores no abandonen La Ciudad del Fútbol para evitar contagios por Covid. Para ello se han creado espacios y salas con actividades, las mismas que se han construido cuando la selección se concentraba en los países que eran sedes de torneos.

Para paliar los momentos de inactividad los jugadores de la selección de España tienen a su disposición una sala de juegos. Dardos, futbolín, tenis de mesa, air hockey, máquinas arcade de los ochenta y un simulador doble de carreras conectado a una PS5 aparecen en un espacio que haría las delicias de cualquier adolescente. «Tenemos buenos piques entre nosotros», admite Oyarzabal.

Según cuentan los empleados de la selección, la sala recreativa sirve también para fomentar la convivencia entre los futbolistas y el cuerpo técnico, que disponen así de un espacio común que les permite interactuar fuera de las habitaciones.

Las instalaciones que la Federación Española tiene en Las Rozas son ya la 'burbuja' de la que solo saldrán los jugadores y técnicos cuando haya partidos. La selección irá y volverá a Sevilla cada vez que tenga que jugar uno de los tres partidos de la fase de grupos para minimizar riesgos.

Hay selecciones a las que las autoridades de sus países han permitido vacunarse de cara a la Eurocopa, como es el caso de Italia. No es el de España. Por eso la concentración está marcada por una medias superexigentes para evitar riesgos, en todo lo que sea posible, respecto a la pandemia.

Caso único en las selecciones de primer nivel, la RFEF mantiene las entrevistas con los jugadores. Se ha establecido, lógicamente, una serie de pautas para no caer en situaciones de riesgos. Para ello se han montado un centro de prensa en el polideportivo que tiene la Federación en Las Rozas con diferentes zonas para realizar las entrevistas y las ruedas de prensa diarias.

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