El PP tilda de «política ficción» una moción de censura con Junts con un candidato alternativo a Feijóo

El partido de Carles Puigdemont sigue en el 'no' a sumarse a una moción de censura junto al PP y Vox, pero el rechazo se ha modulado. Lleva semanas no siendo tan tajante, y los postconvergentes admiten haber «hablado» a título superficial de una maniobra «instrumental» con un candidato que no sea Feijóo, para descabalgar de la presidencia a Sánchez y facilitar inmediatamente después la convocatoria de elecciones. Las especulaciones han llegado al punto de airear, como ocurre periódicamente, el nombre de Miquel Roca, uno de los padres de la Constitución, a modo de eventual opción de consenso.

El amago de ruptura de Junts con el Ejecutivo, con otros matices que los anteriores envites, mantiene a los populares en guardia, aunque el partido de Feijóo tiene claro que no va a forzar ningún escenario porque su ruta para llegar a La Moncloa pasa por que Sánchez convoque elecciones anticipadas. En cualquier caso, el líder de los populares ha dejado claro que el candidato en una eventual operación frente a Sánchez sería él y que su primera decisión, si saliera triunfante, sería la de llamar a las urnas.

«No vamos a entrar en estos juegos», respondió el vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local y Análisis Electoral del PP, Elías Bendodo, cuando se le preguntó por la posibilidad de forjar con Junts esa alianza «instrumental». «Los ruidos no nos van a desviar. El PP tiene un plan para España y está aportando soluciones a todos los problemas que generan Sánchez y sus socios, que son los que quieren romper España», incidió.

En la misma línea insistió Alicia García. «Lo único que sabemos es que el Gobierno está muy débil, que nació con un mediador que está en la cárcel [en referencia al exsecretario de Organización del PSOE Santos Cerdán] y que Sánchez debe dar voz a los españoles en las urnas», continuó la portavoz en el Senado.

En el PP no se hacen ilusiones porque también saben que la posible moción de censura sugerida por Junts requiere de la colaboración necesaria de un tercer componente que ahora mismo parece muy lejano a unirse a ella. Vox quiso desmarcarse de cualquier «maniobra política» en la que aparezca Junts. «No vamos a contribuir a engordar el relato mediático que se quiere crear en torno a este asunto», zanjó la portavoz del partido de Santiago Abascal en el Congreso, Pepa Millán, que recordó que Junts es «un partido separatista liderado por un prófugo de la justicia que huyó cobardemente en el maletero de un coche y que se dedica a extorsionar a los españoles» gracias, agregó, a «un Gobierno de la Nación que deja que se extorsione a todos los españoles utilizándonos como moneda de cambio».

El PP, que prefiere centrarse en continuar con su presión al Gobierno, tiene ahora una fecha marcada en rojo: la declaración de Sánchez en la 'comisión Koldo' del Senado, prevista para el próximo jueves, que llega en un clima de máxima tensión, y más después de que los populares denunciaran ayer «amenazas» de personas vinculadas con el PSOE contra los senadores del PP que están preparando la comparecencia. «Basta de acosar a los miembros de la comisión de investigación. No nos van a callar», proclamó García, que no desveló qué senador popular será el encargado de preguntar al presidente.

Además, los populares plantean prolongar su ofensiva en la Cámara alta. Después de la intervención de Sánchez, la comisión continuará con nuevas comparecencias, una vez que el partido de Feijóo anunció ayer que ha prolongado seis meses la duración de este órgano, que ya lleva abierto año y medio. El PP citará a la nueva secretaria de Organización del PSOE, Rebeca Torró; a su adjunta, Anabel Mateos, mujer de Antonio Hernando, secretario de Estado de Comunicaciones e Infraestructuras Digitales y que también fue el segundo de Óscar López cuando éste era el jefe de Gabinete de Sánchez en Moncloa; y a Claudia Montes, ex miss Asturias y expareja de José Luis Ábalos.