El Gobierno Vasco critica que se «incite al odio» en las protestas contra la ley de amnistía

El portavoz del Ejecutivo vasco, Bingen Zupiria, ha realizado estas declaraciones en la rueda de prensa ofrecida tras el consejo de Gobierno, tras ser cuestionado por las movilizaciones e incidentes que se produjeron ayer lunes ante la sede de del PSOE por la Ley de Amnistía y por el posicionamiento del Poder Judicial, en referencia a la declaración institucional aprobada por el CGPJ, en la que asegura que, de aprobarse una Ley de Amnistía supondría «la abolición» del Estado de Derecho en España y «violentaría» la Constitución. Zupiria ha indicado que el asunto ha sido objeto de comentario entre los miembros del gobierno y, por una parte, ha aludido a las consecuencias que «tiene la politización de la justicia».

Zupiria cree que algunos pronunciamientos e iniciativas que se han producido en el Poder Judicial «tienen más que ver con la política y con la ideología que con la Administración de justicia».

En referencia a las manifestaciones y concentraciones, ha reconocido que les preocupa observar la manera en la que se puede crear «un sentimiento de rencor y de odio contra quien piensa diferente». «Estamos viendo manifestaciones que incitan al rencor y al odio, y estas son actitudes que nos preocupan porque pueden tener una incidencia directa en la convivencia democrática que deba existir entre las personas en una comunidad democrática y estas cosas se ve dónde empiezan pero nunca se sabe dónde terminan», ha expresado.

El consejero portavoz ha indicado que «quienes quieren mostrar y tienen el derecho a mostrar sus discrepancias», deben hacerlo «dentro de un modo natural y democrático para impedir que estas situaciones, que son inaceptables desde el punto de vista de la convivencia, lleguen a más».

El PNV ha mostrado su solidaridad al PSOE por los repetidos episodios de protestas frente a las sedes socialistas contra la negociación de Pedro Sánchez y la propuesta de ley de amnistía a los procesados por el Procés catalán. Los jeltzales condenan «los episodios de acoso, insulto y coacción que se han registrado» sobre todo frente a la sede de Ferraz en Madrid.

El PNV denuncian que «la amenaza y la intimidación no tienen la menor cabida en un concepto tan amplio como es el de la libertad de expresión. Repugna, además, que en estos escraches se coreen consignas claramente antidemocráticas en las que se hace apología del franquismo».

Los jeltzales han hecho llegar su solidaridad y acompañamiento al Partido Socialista como partido que «también hemos sufrido ataques en nuestras sedes de otro tipo de extremismo intolerante».