Génova vuelve a aplazar el congreso del PP vasco y pide rescatar el voto huido al PNV
El cónclave regional se retrasaría hasta finales de 2023 o inicios de 2024 para evitar «ruido» y centrar el partido ante las elecciones generales
El PP de Feijóo quiere modificar el rumbo de la formación en Euskadi. Frente a la épica contra ETA que propició Teodoro García Egea como secretario general del partido y que acogió con entusiasmo Carlos Iturgaiz, ahora se dará prioridad a un discurso pragmático, pegado a los problemas cotidianos de los vascos, con el objetivo de recuperar los votos huidos al PNV. Es decir, se trata de dejar en un segundo plano el aplauso del resto de España tocando la tecla siempre sensible del terrorismo y de las víctimas –a las que en ningún caso se olvidará– y apostar por ganar votos sacando a la palestra las fallas del PNV y las alternativas del PP.
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Este fue el mensaje que dejó el pasado viernes Miguel Tellado en su visita a Bilbao para reunirse con la junta directiva regional. En su discurso público ante la militancia, comenzó a marcar el camino cargando contra el PNV y recordó que los jeltzales forman parte del bloque de partidos que permitieron la investidura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
En consecuencia, resaltó el vicesecretario de Organización nacional del partido, «el PNV también es responsable de la mala gestión», en referencia a los problemas que atraviesa el Estado y que «también afectan a los vascos».
Esta línea de confrontación con los jeltzales fue explicitada por el vicesecretario de Organización en la cena posterior al acto público, a la que asistieron una docena de dirigentes del PP vasco, entre ellos obviamente Iturgaiz. En ese ámbito restringido Tellado resaltó la necesidad de recuperar los votos que ha perdido el PP en favor del PNV. Hay que tener en cuenta que los populares vascos han perdido desde 2000 más de 200.000 votos y 6 escaños en el Congreso. De esas papeletas, según diversos estudios demoscópicos, el 30% serían votos huidos al PNV.
El vicesecretario de Organización, según fuentes del partido, indicó que la estrategia para recuperar esos electores pasa por realizar un discurso pragmático, pegado a la realidad vasca, sin empeñarse en buscar el aplauso de Madrid. En ese sentido, Tellado dio vía libre al PP vasco para desarrollar una propuesta basada en escuchar el pulso de la calle. A su vez, incidió en que las listas se conformen con ciudadanos vascos, no con 'paracaidistas'.
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El segundo mensaje de Tellado fue que el congreso del PP vasco deberá esperar a finales de 2023 o comienzos de 2024. Las fuentes consultadas por este periódico indican que Génova prefiere convocar un congreso ordinario en esas fechas, que es cuando tocaría, que poner en marcha un cónclave extraordinario en los próximos meses. En este segundo caso no daría tiempo a elaborar con sosiego una nueva ponencia política ni a que en su caso cuajaran candidaturas que compitan con Carlos Iturgaiz.
Elecciones autonómicas
Además, se prefiere evitar el «ruido» que generaría un proceso de estas características y que podría descentrar a un partido que encara a finales de 2023 las elecciones generales. El retraso también permitiría afrontar las autonómicas de 2024 con un líder que contaría con un respaldo renovado.
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El actual presidente de los populares vascos accedió al cargo en octubre de 2020, tras suceder a un Alfonso Alonso caído en desgracia ante Pablo Casado y García Egea. El mandato es para cuatro años, de manera que el relevo o ratificación se debería lleva a cabo en un congreso ordinario a celebrar en 2024.
Estas mismas fuentes indican que Génova prefiere poner antes en marcha los congresos pendientes en otras comunidades autónomas donde el PP pasa por dificultades internas que han trascendido a la opinión pública. En el caso de Euskadi, la dirección nacional del PP sabe que existe cierta oposición a Iturgaiz, pero de puertas afuera la imagen es de unidad y, por tanto, no urge intervenir.
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Lo cierto es que a día de hoy ni Feijóo en su visita de marzo ni Tellado en la del pasado viernes han avalado en público a Iturgaiz ni lo han defenestrado. Lo que es innegable es que Feijóo necesita recuperar votos en Euskadi si quiere llegar a la Moncloa con una mayoría suficiente para no depender de Vox.
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