EH Bildu aparcará la beligerancia y combinará críticas con manos tendidas

El entendimiento sobre el nuevo estatus entre PNV y EH Bildu se reflejará hoy en el pleno de política general. La coalición abertzale aparcará la beligerancia contra el lehendakari y combinará mano tendida al diálogo y el acuerdo con críticas al modelo social del Gobierno de Iñigo Urkullu y demandas de mejoras para los pensionistas. Un discurso, en cualquier caso, que no se prevé tan duro con el jefe del Ejecutivo como los del resto de la oposición, Elkarrekin Podemos y PP. EH Bildu pone en valor lo construido hasta ahora con los jeltzales en la ponencia de autogobierno y rebajará el tono considerablemente. En el pleno de hace un año, marcado por la efervescencia soberanista en Cataluña en vísperas del referéndum del 1-0, la portavoz Maddalen Iriarte fue muy dura con Urkullu. Doce meses después, las tornas han cambiado con el acuerdo de bases sobre el nuevo estatus vasco, que Iriarte pondrá en valor como medida en favor de un mayor «bienestar social y más democracia». Y aunque Urkullu ha marcado perfil, como lehendakari de todos los vascos, insistiendo en ensanchar ese pacto a PSE-EE y Elkarrekin Podemos, EH Bildu ofrecerá su mano para mantener esas bases soberanistas.

Será de nuevo Maddalen Iriarte la portavoz de la alianza de Sortu, EA, la disuelta Aralar, Alternatiba y los independientes, en un nuevo test para una política que se perfila como futura candidata a lehendakari y principal competidora de Urkullu. Iriarte planteará al Ejecutivo medidas para «mejorar la vida» de la gente como garantizar en todas las contrataciones públicas salarios mínimos de 1.200 euros, que Euskadi haga uso de sus competencias para subir las pensiones más bajas, que se comprometa «de verdad» con el tejido industrial y acabe con los recortes en educación y sanidad. El líder de la coalición, Arnaldo Otegi, inhabilitado para ejercer de parlamentario, estará en la tribuna de invitados.