Casi inauguramos el mes de noviembre con las visitas a los cementerios. Hoy la cosa ha cambiado mucho: la presencia de los tanatorios cada vez ... es mayor y hasta poco a poco los funerales van reduciéndose. El modo y la hora de nuestra muerte no dependen de nosotros. Ahora bien, decidir cómo vamos a vivir sí está en nuestras manos. Al final la vida eterna no está desconectada de la vida presente: son dos etapas de un mismo camino.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión