Sofocado un fuego en la incineradora de Zubieta que no ha causado daños

El fuego originado este martes en la incineradora de Zubieta se ha producido en el foso de recepción de residuos voluminosos y no ha ocasionado daños materiales ni personales, dado que se ha extinguido rápidamente siguiendo los protocolos establecidos. Los motivos que han podido dar lugar a las llamas se investigan. Lo que sí se descarta es que el incendio esté relacionado con el transformador principal que fue instalado el fin de semana después de haber sido reparado tras la avería que sufrió en septiembre.

Ha sido el propio personal de la instalación, con el apoyo de los bomberos de San Sebastián, el encargado de sofocar las llamas, iniciadas a media mañana y que no han originado mayores consecuencias.

Según la explicación del Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK), "los detectores de humos de los que está dotada la instalación han descubierto el suceso y han activado las alarmas de la sala de control. De forma inmediata, el personal de la instalación ha activado el protocolo de actuación de emergencias utilizando los equipos anti-incendio". Para hacer frente al incidente, "los trabajadores de la incineradora han puesto en marcha los protocolos previstos y han iniciado las labores de extinción, aplicando los procedimientos de seguridad previstos y dando aviso a los bomberos para la supervisión de todos ellos".

El fuego ha quedado "rápidamente" controlado y sofocado, habiéndose solventado "sin haber producido ningún tipo de daño".

El lugar del incidente permanecía esta tarde bajo la supervisión del personal de la planta y de los bomberos.

La aparición de un fuego en la incineradora ha sido dada a conocer poco antes de las 15 horas a través de la cuenta de Twitter de los servicios de emergencia SOS Deiak. Para entonces el incendio ya había sido sofocado.

 

Entretanto, EH Bildu ha iniciado una campaña para mostrar sus dudas sobre la "legalidad" de la puesta en marcha de la incineradora mediante la presentación de solicitudes de información por escrito en las instituciones (Juntas Generales de Gipuzkoa, Parlamento Vasco y Congreso de los Diputados), sobre si esta instalación cuenta con todos los permisos necesarios. Cuestiones que la Diputación ha reiterado en varias ocasiones que están cumplidas.

De hecho, la instalación lleva más de un año activa. Primero en pruebas desde finales de 2019 y desde junio de 2020 a pleno rendimiento tras recibir la Autorización Ambiental Integrada del Gobierno Vasco. Hace un mes se cumplimentó un último trámite, referido a la gestión de la infraestructura, la firma del acta de inicio de operación por parte del Consorcio de Residuos (GHK) a Ekondakin, la agrupación de empresas que la ha construido y que la gestionará durante 35 años a cambio de un canon de unos 24 millones de euros anuales.

Con la incineradora siendo ya una realidad operativa, el coordinador de EH Bildu de Gipuzkoa, Eneko Maioz, ha señalado este martes en una comparecencia que "las explicaciones que ha ofrecido hasta ahora la Diputación no han satisfecho" las preguntas que se formula la coalición soberanista y ha recordado varios incidentes relacionados con la infraestructura, como una avería en el transformador principal o el vertido de Arkaitzerreka, además de calificar de "confusos" los datos sobre la generación de energía, "sospechosa" la gestión de los permisos y denunciar una "falta de control de emisiones".

Por otro lado, el colectivo anti-incineradora GuraSOS ha anunciado que la Fiscalía de Gipuzkoa ha aceptado abrir una investigación sobre el presunto funcionamiento ilegal de la instalación tras la denuncia presentada por esta asociación.

Esta decisión se produce después de que el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 de San Sebastián haya vuelto a fallar contra una demanda de GuraSOS y haya rechazado paralizar cautelarmente la puesta en marcha de la instalación.