La temperatura del agua del mar en Donostia va camino de otro récord en agosto

El Aquarium de Donostia lleva un registro diario de la temperatura del agua en superficie desde 1947, y según ese registro el día 5 de agosto es el día del año en el que el mar está más caliente. El promedio de los últimos 75 años es de 22,3 grados. Pero este viernes se ha superado en más de dos grados, con 24,3, la misma temperatura que se produjo en 1990, según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Este dato se queda cerca del récord de esta jornada, registrado en 2018, cuando el agua en Donostia llegó a 25 grados. En 2000, se anotó el dato más bajo, con 20. Si el panorama no cambia, en las próximas semanas se puede batir esa cifra debido a las olas de calor de distinta intensidad que está sufriendo Gipuzkoa en el presente periodo estival.

Aemet justifica este aumento de la temperatura del agua que el sol incide de pleno y calienta en exceso la superficie marina, lo que, unido a la escasez de viento, impide que el agua circule y se mezcle con la del fondo, donde está más fría.

Durante la temporada de playa en San Sebastián, de junio a septiembre, la temperatura del agua no baja por debajo de 20 grados, lo que es muy agradecido por los bañistas, que lo consideran un valor muy adecuado para nadar cómodamente, sin frío ni calor. No hay que olvidar que la temperatura media del agua en San Sebastián en invierno alcanza los 12.9 grados, en primavera 14 y en otoño 18.4. Esto lo saben muy bien las personas que se bañan todos los días del año en La Concha, por ejemplo. Han comprobado en sus propias carnes que el mar está cada vez más caliente. Hasta los años 80 casi no se superaban nunca los 23 grados, desde entonces hasta el 2000 se hizo relativamente frecuente llegar a 24. De ahí en adelante se anotan temperaturas de 25 grados casi todos los años.

El registro del Aquarium se lleva a cabo cada día con un método singular. Desde hace 75 años, alrededor de las diez de la mañana el personal encargado baja un cubo al mar desde el balcón de las oficinas para medir la temperatura del agua. Además, en AZTI toman nota de la temperatura del fondo del mar, a 50 metros de profundidad, y han visto que también han subido los valores conforme pasan los días. Estas dos operaciones posibilitan una información muy valiosa, porque en las máximas se percibe claramente los veranos más cálidos y las temperaturas más altas de la superficie del mar.

La situación de San Sebastián, y por extensión de todo el litoral cantábrico va en consonancia con lo que ocurre en el resto de la costa peninsular. En verano en el Mar Mediterráneo se llega a unos 28 a 30 grados, mientras que esta semana, por ejemplo en el Levante, están entre dos y tres grados por encima de lo normal respecto a la climatología de la primera semana de agosto. En el sureste peninsular, en la costa de Murcia y en Andalucía oriental las temperaturas del agua están hasta 4 grados más cálidas de lo normal y entre 3 y 4 grados en Baleares.

Entre las consecuencias de este aumento de temperatura del mar, los expertos destacan la sensación de bochorno, la proliferación de algas y medusas en las playas y las noches tropicales e incluso tórridas en las zonas costeras, debido a la escasez de brisa y al incremento de la humedad en el aire.

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