Un vehículo en dirección contraria causa dos muertos en la N-I en Legorreta

Todo hace indicar que uno de los vehículos accedió a la N-I en sentido contrario y provocó una brutal colisión frontal entre ambos. Hasta el lugar de los hechos se desplazaron de inmediato agentes de la Ertzaintza, Bomberos de los parques de Tolosa y Ordizia y servicios sanitarios, que socorrieron a los accidentados. Sin embargo, el facultativo que se desplazó hasta el lugar solo pudo certificar la defunción de uno de los ocupantes de los vehículos, que según el departamento de Seguridad vasco falleció en el lugar debido a la gravedad de las lesiones que presentaba. Este periódico ha podido confirmar que este primer fallecido es un vecino de Beasain de 42 años que viajaba en el vehículo que circulaba en dirección contraria.

Las otras cuatro personas fueron trasladadas al Hospital Donostia heridas de diversa consideración. Una de ellas, una mujer natural de Ataun que viajaba con su pareja en el turismo que circulaba correctamente por la N-I, falleció a las pocas horas en el hospital. Seguridad no ha informado sobre la evolución del resto de los heridos. Lo que sí ha confirmado es que cada uno de los fallecidos viajaba en uno de los vehículos accidentados.

La Ertzaintza ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias del accidente. El impacto principal de ambos vehículos se ha producido en la parte frontal de los mismos.

Se trata de la segunda y tercera víctima mortale en las carreteras guipuzcoanas en lo que llevamos de año, tras el atropello de la joven Joana de Almeida el pasado 5 de enero en la subida al alto de Gaintxurizketa. El último caso de atropello mortal en vías interurbanas se había producido en agosto del año pasado, cuando una mujer de 54 años falleció tras ser alcanzada por una motocicleta en Irun.

Según datos del departamento de Seguridad del Gobierno vasco, a estas alturas de año, en 2022, se habían contabilizado hasta cuatro personas fallecidas, el doble de lo que suma este año.

Y a nivel general, en Euskadi desde que ha arrancado este 2023 se han producido cuatro fallecidos en carreteras, tres de ellos se trataba de peatones atropellados, uno en cada territorio histórico.