1930 | La casa de Francia

En otro escenario muy distinto, el del Teatro Victoria Eugenia, se reunía lo más granado de la colonia francesa en San Sebastián, para proceder al reparto de premios, consistentes en libros y diplomas, a los alumnos más destacados de las Escuelas Francesas.

Allí estuvieron, junto a numerosas autoridades, el Subsecretario de Estado del Ministerio del Interior francés, René Victor Manaut, y el embajador de Francia, Charles Corbin, recordando que en las Escuelas Francesas, inauguradas en 1913 por el Presidente del Consejo de Ministros de Francia, Louis Barthou, habían recibido instrucción 8.000 escolares franceses y 3.400 españoles. Terminado el acto todos se trasladaron hasta el Paseo de Francia donde, en el edificio de las Escuelas Francesas, quedaría inaugurada, oficialmente, la Casa de Francia.

El trayecto fue momento oportuno para recordar cuando en 1898, el ministro ya retirado, y a la sazón cónsul de Francia en San Sebastián, Blanchard de Farges, creó la llamada Sociedad de Beneficencia y Enseñanza, con el fin de ayudar a los franceses residentes en la nuestra ciudad dando a sus hijos una instrucción acorde con su nacionalidad. En 1902 se creó un Comité de Señoras para dar clases de francés a personas adultas, haciéndolo en su sede de la calle Arrasate, llegando a contar con 240 alumnos y alumnas gracias a la aportación económica del Comité Regional, Alianza Francesa y Gobierno francés.

El año 1912, pasando el verano en San Sebastián el senador Strauss y el embajador de Francia en Madrid, Mr. Geoffray, conocieron la existencia de la escuela y, encontrándola sumamente modesta, consiguieron una subvención de 68.000 francos, a los que se sumaron 16.000 de aportación popular y 80.000 pesetas de un crédito de la Caja de Ahorros Municipal, para construir unas nuevas.

Así las cosas, el 3 de enero de 1913 se compró el solar del paseo de Francia, Luis Elizalde diseñó el edificio, y el 28 de septiembre se inauguraron las nuevas Escuelas Francesas. A ellas llegaron, tal día como el de hoy del año 1930, todos los invitados que habían acudido al Victoria Eugenia, acompañados del ministro de Fomento español, Leopoldo Matos.

La entrada al edificio se hizo a los sones de 'La Marsellesa' y 'La Marcha Real' y fueron sucediéndose los discursos de protocolo marcándose, en todos ellos, la ayuda recibida por el pueblo donostiarra.

Concluidas las disertaciones el representante francés colocó al arquitecto Luis Elizalde, autor del proyecto de la Casa de Francia y director de la construcción, la cruz de oficial de la Legión de Honor, y a Edmundo Deslandés, «uno de los más antiguos componentes de la colonia francesa en San Sebastián», la insignia de oficial de la Orden del Nichan Iftikhar (Orden de la Gloria) del Protectorado de Túnez. Hubo recuerdo a los Héroes de la Gran Guerra en el monumento anexo al edificio, actualmente conservado en Villa Sacramento de Ategorrieta.