El investigador Jordi Llop y Vanesa Gómez, participante en el proyecto, posan con un ciclotrón en el centro CIC biomaGUNE. FERNANDO DE LA HERA

Nanorrobots contra el cáncer de vejiga

Una investigación coliderada por el centro donostiarra CIC biomaGUNE ha conseguido reducir en un 90% el tamaño de estos tumores en ratones

Patricia Rodríguez

Lunes, 15 de enero 2024, 11:21

Nanorrobots que viajan autopropulsados a través del cuerpo y consiguen detectar y reducir tumores. Tras 8 años de estudio, un equipo de investigación liderado por ... el centro donostiarra CIC biomaGUNE y el Instituto de Bioingeniería de Cataluña (IBEC) ha sido capaz de reducir en un 90% el tamaño de tumores de vejiga en ratones administrando una sola dosis de nanorrobots propulsados por urea. El estudio acaba de publicarse en la prestigiosa revista Nature Nanotechnology y se ha desarrollado con la colaboración del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) y de la Universitat Autònoma de Barcelona.

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Las aplicaciones futuras en medicina de estos dispositivos de escala nanométrica -1 nanómetro es la millonésima parte del milímetro- son «muy prometedoras». Jordi Llop, investigador del CIC biomaGUNE que ha coliderado el proyecto, explica la verdadera dimensión de este estudio al ser «uno de los primeros ejemplos en los que se muestra la eficacia terapéutica de los nanomotores (partículas con capacidad para moverse por sí mismas dentro del cuerpo) en un tumor. Además abre un campo importante de posibles aplicaciones en otras patologías más allá del cáncer de vejiga».

Acumulación de nanorrobots en el tumor.

Por de pronto, este trabajo abre la puerta a nuevos tratamientos para el cáncer de vejiga, que reduzcan el tiempo de hospitalización. «Con una sola dosis vemos una disminución del 90% del volumen del tumor. Es mucho más eficiente, teniendo en cuenta que lo habitual en pacientes con este tipo de tumores es que vayan entre 6 y 14 veces al hospital. Con este tipo de tratamiento aumentaríamos la eficiencia, reduciendo el tiempo de hospitalización y el coste del tratamiento», explica Samuel Sánchez, profesor de investigación en el IBEC.

Movimiento autónomo

Llop explica el viaje de estas partículas diminutas a través del cuerpo, que incorporan en su superficie diversos componentes con funciones específicas. Uno de ellos es la enzima ureasa, una proteína que reacciona con la urea, presente en la orina, haciendo que sean capaces de propulsarse. Dicho de otro modo, «la urea sería el combustible con el que se mueven de manera autónoma». Otro componente clave es «un isótopo radioactivo que enganchamos a los nanomotores, capaz de matar células tumorales por sí mismo. Los administramos de manera local, en la vejiga, lo que disminuye la probabilidad de generar efectos adversos y evita la toxicidad en otros órganos».

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En estos momentos, la investigación se encuentra en fase preclínica, que incluye estudios en animales de experimentación. «Hemos probado la eficacia del tratamiento en un modelo de cáncer en ratones y ahora falta por hacer una evaluación toxicológica completa de estos nanomotores. Esperamos que en unos cinco años se puedan empezar a hacer los primeros ensayos en humanos», valora.

En estos momentos, el equipo estudia si estos tumores vuelven a aparecer tras el tratamiento. Y es que el cáncer de vejiga, además de tener una de las tasas de incidencia más elevadas del mundo siendo el cuarto tumor más frecuente en hombres, es uno de los más recurrentes: casi la mitad de los tumores vuelven a aparecer al cabo de 5 años. Los tratamientos actuales han demostrado buenas tasas de supervivencia, según estos investigadores, pero una eficiencia terapéutica baja, lo que requieren visitas asiduas al hospital.

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Asimismo, en investigaciones previas los científicos confirmaron que la capacidad de autopropulsión de los nanorrobots les permitía alcanzar todas las paredes de la vejiga. Esto supone una ventaja respecto al procedimiento actual, donde una vez administrado el tratamiento directamente en la vejiga, el paciente debe cambiar de posición cada media hora para que el fármaco llegue a todas las paredes.

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