Los hosteleros critican el agravio comparativo respecto a otros sectores
Consideran «injustas» las exigencias al ocio nocturno, que ya ha perdido la facturación de verano, que sirve de colchón el resto del año
En estas dos últimas semanas desde que entrara en vigor la orden que limita la actividad de los bares y discotecas hasta las 1.30 ... horas, Iñaki Unzueta, del Be Club de San Sebastián, ha dejado de facturar el 90%; Tristán Montenegro, de la discoteca Bataplán, directamente ha optado por abrir exclusivamente la terraza y mantener cerrado el local inferior, y Natalia Medina, del pub The Hole, teme lo que pueda suceder cuando llegue a octubre, teniendo en cuenta que agosto prácticamente lo dan por perdido.
Publicidad
Los tres se dedican al ocio nocturno en Gipuzkoa y los tres coinciden en que sería «beneficioso para todos» que el recurso prosperase, aunque «ya hay daños que son irreparables». Y casi tanto como el daño económico, se refieren al moral. A lo «injusto» que está siendo el Departamento con un sector «que en Gipuzkoa no ha dado ni un solo caso positivo en coronavirus», y que entienden que no se está tratando de la misma forma que a otros sectores, a los que se les está «compensando económicamente».
Medina, que fue la convocante de la concentración que realizaron decenas de hosteleros hace unos días contra una medida que atañe a los bares de toda Gipuzkoa –también Bergara y Tolosa, a los que levantaron hace unas semanas las limitaciones extraordinarias–, reitera que «en los autobuses nadie limpia las barras o asientos donde se apoya gente permanentemente. Tampoco en los ambulatorios o las máquinas de la OTA». Sin embargo, a la hostelería y, en concreto, «a nosotros, se nos machaca». «Se habla del ocio nocturno como si fuéramos unos apestados, como si la gente solo se emborrachara de noche», critica. En esa línea, comenta además que cada vez se ven «más botellones» a horas más tempranas.
¿Seguro o inseguro?
Para Tristán Montenegro el resumen de la situación es bien sencillo. «Si un local es seguro a las 12 de la noche lo es a las 2 de la madrugada. Y si no lo es a una hora tampoco a otra. La medida es un sinsentido», dice en referencia a poder congregar 500 personas en su local a las 22.00 horas, y no poder hacerlo de madrugada.
Publicidad
Casi llegando al ecuador del mes más importante del año en cuanto a facturación, confiesa que «el daño ya está hecho y el verano ya no lo salvamos», lamenta. Matiza, además, que «este sector involucra a muchas personas, no solo a los que salen de fiesta. Están resultando afectados repartidores, técnicos de sonido, personal de limpieza, artistas...».
Desde la barra del Be Club, Iñaki Unzueta prefiere mantenerse escéptico con que el recurso pueda salir adelante. «Los políticos son los que tienen que mover ficha, y visto lo visto, nos van a machacar más todavía», dice con hartazgo.
Suscríbete los 2 primeros meses gratis
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión