Cómo captar la vida

Nuestro periódico ya solía publicar fotonoticias informativas, esto es, fotografías acompañadas por un corto texto (o un largo pie de foto, como se vea) hasta que, de pronto, se le adjudicó a una fotonoticia un espacio estable diario. Ofrecía estampas de la vida cotidiana donostiarra y su redacción era más cuidada, digamos que literaria. Por ejemplo, esta que apareció en diciembre de 1984…

¿Se han fijado en la firma? Por supuesto, S.A. eran las iniciales de Santiago Aizarna, querido escritor de Oiartzun y durante décadas colaborador de DV, como crítico cinematográfico primero y como crítico literario después. Aizarna nunca firmó con su nombre completo aquel encargo que le endosaron, de apoyarse cada día en una fotografía, al principio con frecuencia del gran Fernando Postigo, para darle una vuelta a algún detalle de la vida que nos rodea.

Como otro día también de diciembre de 1984…

En sus inicios, la sección sin nombre aparecía bien rodeada de los apuntes ciudadanos de 'El Paseante', la mirada retrospectiva de R.M. (Juan Mari Peña) en 'Koxkas' y la crónica social de un clásico, Miguel Vidaurre, con 'La ciudad y sus gentes'.

Entre ellos, la cultura de Aizarna hacía que donde otros vemos a dos ancianos normalitos él descubriese a Edipo y la Esfinge…

La anterior fotonoticia era de diciembre de 1985. La siguiente, de abril de 1986, cuando S.A., siempre tan sensible, se alegraba con la visión de un humilde músico camino de su trabajo…

Aquella modesta y entrañable mirada, a través de una imagen y un texto, a nuestro vivir cada día se mantuvo durante años, aunque a veces cambiase de formato, estrechándose y estirándose como la sombra de un niño…