Dance World Cup, Donosti Cup y Sanfermines: el verano turístico arrancará rozando el lleno

La cada vez mayor presencia de turistas en Donostia y el récord de visitas que está recibiendo la web de Donostia Turismo, el 60% desde el extranjero, anticipan un 'boom' turístico este verano, una vez que el fin de la pandemia ha reducido el miedo a viajar. «Aunque hay que decirlo con la boca pequeña, no sea que se tuerza» repiten los interlocutores del sector turístico tras los sinsabores sufridos durante la pandemia.

Al ingente goteo de turistas que visitan Gipuzkoa por su cuenta hay que sumar los grandes eventos que, tras dos años de suspensión por la crisis sanitaria, regresan en su formato original, lo que supone movilizar a un importante número de personas. Es el caso de la Donosti Cup, que celebra su 30 aniversario con cifras de récord, o los Sanfermines, que atraen a cientos de visitantes, sobre todo del otro lado del Atlántico, que ven en San Sebastián una parada obligada previa o posterior a su paso por Pamplona. Unos eventos fijos en el calendario al que este año se suma otro excepcional: la Dance World Cup.

Donostia acogerá entre el 24 de junio y el 2 de julio las finales de este macrofestival que reúne a academias de baile y escuelas de danza privadas, con cientos de bailaraines infantiles y juveniles que viajan con sus profesores y padres para participar en este encuentro. Si las previsiones de los organizadores se cumplen, San Sebastián recibirá a 5.000 niños y jóvenes de 40 países, además de a sus acompañantes. La Dance Worl Cup tendrá como sede durante nueve días tanto el cubo grande como la sala de cámara del Kursaal, además del Teatro Victoria Eugenia varios días para sus galas. Este viernes tienen previsto realizar un desfile, a modo de ceremonia inaugural, entre el Kursaal y el Ayuntamiento.

«A finales de este mes y a inicios de julio van a coincidir varias cosas en la ciudad. Primero está la Dance World Cup, que es un evento mundial, a la que sigue la Donosti Cup, que está muy consolidado, y luego San Fermín, que siempre influye. La ciudad va a estar a tope», anticipa Fran González, director del Hotel Codina.

No hay más que realizar una búsqueda en un portal tan popular como Booking para corroborar la alta ocupación, ya que este lunes advertía de que el 91% de los alojamientos ya no están disponibles si se quieren reservar 3 noches de hotel entre en el fin de semana del 23 al 26 de junio. El siguiente, entre el 30 de junio y el 3 de julio, el 88% de los alojamientos están ya cogidos. El fin de semana de San Fermín el porcentaje es muy similar, del 91%.

«Los eventos monográficos en torno a una temática, como es el caso del fútbol y el baile, tienen su tirón», señala Isabel Aguirrezabala, directora de San Sebastián Turismo, quien valora la trayectoria de la Donosti Cup y la celebración del Dance World Cup, un evento «potente» de diez días de duración en el que los grupos pariticapantes bailarán sus coreografías de ballet, moderno, jazz, claqué o Hip Hop y asistirán a talleres en los dos escenarios del Kurssal y en las galas que tendrán lugar en el teatro Victoria Eugenia.

Los organizadores barajaron otras ciudades pero finalmente se decantaron por Donostia para el que será el primer gan evento tras la pandemia. En anteriores han acogido ciudades como Braga (Portugal) o Offenburg (Alemania) han acogido estas finales de la danza.

Moliné Travel es la agencia oficial de este evento. Con sede en Cataluña, están ultimando las contrataciones y calculan que se han ocupado del alojamiento «de cerca de 3.000 personas» que llegarán a Donostia de distintos países, además de los que viajan por su cuenta. «No sé que ha pasado este año, pero vienen cuatro grupos numerosos de Israel, en total unas 600 personas», explica desde Cataluña Lauren Puértolas. Otro de los grupos más numeroso llegará de Canadá, y también de Islandia. Habrá presencia de bailarines estadounidenses, así como alemanes e ingleses.

La mayoría de los participantes son adolescentes que viajan con padres o profesores, y con distintos presupuestos. «Nosotros les ofrecemos desde los hoteles más lujosos hasta pensiones y albergues más asequibles. Tenemos desde canadienses que se van a quedar en San Sebastián los diez días del evento a mallorquines que estarán cuatro y se van a casa cuando acaben de bailar», explica.

Durante el evento los empleados de la agencia se trasladarán Donostia para gestionar las peticiones de los visitantes, «desde excursiones de día hasta reservas en restaurantes».

Para cuando los últimos asistentes al Dance World Cup hagan las maletas, los primeros participantes de la Donosti Cup ya habrán llegado a San Sebastián. El evento futbolístico cumple este 2022 sus 30 años en mejor forma que nunca. Reunirá a 760 equipos, un total de 12.800 jugadores, de los que más de 1.000 son americanos, 600 franceses y 200 japoneses. Además, viajarán a Gipuzkoa equipos de Chile, México, Suiza, Bélgica, Reino Unido, Suecia, El Salvador, Palestina o incluso República del Congo, entre otros países. A los jugadores hay que añadir unos 6.000 acompañantes adultos, entre familiares o entrenadores, lo que convierte esta cita deportiva en el evento recurrente que más pernoctaciones genera en Euskadi, con estancias medias de 6,5 noches.

Los equipos de fútbol y sus familias ocuparán casi 40 hoteles no solo de Donostia, sino también de municipios del alrededor, junto a 20 albergues y 6 hostales, lo que da cuenta de la magnitud de este evento que vuelve con fuerza tras la pandemia. «La Donosti Cup ocupa mucho, trae a gente de todo el mundo», destaca Fran González.

Más difícil es cuantificar la cifra de turistas que recalan en Gipuzkoa con motivo de los Sanfermines. «Se solía notar mucho, sobre todo en viajeros de larga distancia, que o bien antes o después de ir a Pamplona tenían una cita obligada con Donostia, que tiene un nombre, un prestigio. Para un estadounidense, por ejemplo, estar a una hora es una distancia muy pequeña», explica Aguirrezabala, quien incide en la importancia de fomentar un turismo «sostenido» que se pueda gestionar a lo largo del año, más allá de la temporada de verano.

De momento, la temporada estival promete, coinciden en el sector, tras una Semana Santa que también resultó buena, lo que supone el mejor termómetro para medir la temperatura del sector que viene de sufrir la pandemia. «Pero hay que ver qué pasa», insisten.

La alta demanda para determinadas fechas redunda en los precios, con tarifas de temporada alta. Por ejemplo, alojarse 3 noches entre el jueves 30 de junio y el domingo 3 de julio en Sercotel Hotel Europa costaba ayer en el portal Booking 918 euros, en el Axel 582, San Sebastián Orly 976, en el Room Mate Gorka 1.298 y en el María Cristina 2.851 euros.

Dormir en Donostia entre el 7 el 10 de julio sale por 893 euros en el Zenit, 847 en el Barceló Costa Vasca, un euro más caro que el Zinema7, 920 euros en el Arima, 990 en el Arrizul Beach o 3.133 euros en el María Cristina.

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