Cirugías y consultas pospuestas: cientos de médicos paran en Gipuzkoa para rechazar el Estatuto Marco propuesto por Sanidad

Puntuales, a la hora que les habían convocado, los sanitarios vestidos con la bata blanca han protagonizado una estampa inusual por la cantidad de gente reunida. Han portado pancartas de 'Euskadi, por un estatuto médico y facultativo propio', '24 horas son demasiado', '24 horas nos matan' o 'sin médicos no hay sanidad'. Entre vitores, José luis Paulín, médico de Atención Primaria, ha sido el primero en tomar la palabra a las puertas de la escalinata para reclamar un texto básico propio que recoja las peculiaridades de los médicos. «No estamos pidiendo que nos reconozca de más, sino lo que nos corresponde. Nosotros somos la espalda sobre la que todo carga y tenemos unas responsabilidades y eso tiene que quedar reflejado», ha explicado haciendo alusión a que en la mesa sectorial tienen «voz pero no voto y no puede ser que nuestros derechos y obligaciones los decidan otros, queremos un estatuto médico por médicos y para los médicos».

En la misma línea se ha pronunciado la doctora Gloria Díaz quien ha leído un comunicado explicando las mejoras que solicitan al Ministerio de Sanidad y ha desatado los aplausos de los allí presentes. Entre ellas ha citado, el acceso al grupo más alto de la clasificación a personal médico y titulados superiores, la eliminación progresiva de la jornada complementaria obligatoria, que las guardias no excedan las 17 horas, el reconocimiento de la penosidad, riesgo para la salud y dificultad de conciliación, así como la consideración del riesgo de la profesión. «No solemos participar en estas huelgas por la repercusión que tiene después en nuestro trabajo pero se nos tiene que reconocer. Al final estar hoy aquí nos perjudica también a nosotros, pero lo hacemos. Lo hacemos para pedir una jubilación anticipada, para ser reconocidos como una profesión de riesgo, que las guardias localizadas se reconozcan como tiempo efectivo de trabajo o que se tengan en cuenta todos los años de ejercicio, incluyendo el periodo de formación como residente», ha añadido la médico de Urgencias.

Más médicos presentes en la concentración han hecho hincapié en la importancia del día de hoy. Y es que las negociaciones para renovar la normativa, vigente desde 2003, llevan unos dos años en curso, un periodo en el que el Ministerio ha presentado varios borradores, pero los sindicatos lamentan que no recoge sus peticiones. «Es necesario hacer huelga porque están negociando personas que son nos médicos, no tenemos voto. Es como si el personal de tierra negociara las condiciones de los pilotos sin saber cuáles son sus necesidades, no tiene sentido», ha denunciado Xavier Urteaga. A juicio del cirujano, hoy se ha evidenciado que hay más «unión» que nunca porque «nos estamos movilizando. Estamos juntos en esto, a una todos». Por ello, confía en que estas movilizaciones den su fruto y «hagan ruido porque algo tiene que cambiar. Hoy hemos dado un paso».

Entre los manifestantes también había facultativos para los que era la primera vez. Es el caso de Sandra y de Naomí que han reconocido que nunca antes habían parado pero ahora «es necesario. Solo pedimos que se nos reconozcan unos derechos básicos». «Es algo personal, por la lucha de los derechos de los médicos», ha añadido la médico de Onkologikoa.

Tras la concentración frente al Hospital, la marea blanca se ha encaminado hacia el ambulatorio de Amara donde han realizado otra declaración en la misma línea.

La huelga de hoy, la segunda a nivel estatal en apenas tres meses, está repercutiendo también de puertas adentro en los ambulatorios y hospitales donde se han activado los servicios mínimos para asegurar la atención básica. Urgencias, cuidados críticos y tratamientos vitales están cubiertos, mientras que otras áreas pueden sufrir retrasos o reprogramaciones.

Algunos guipuzcoanos que han acudido a primera hora de la mañana a su centro de salud y se han encontrado con un cartel anunciando que su médico no pasaría consulta. Es el caso de una madre que ha acudido a un ambulatorio de Donostia con su hijo de siete años y que no ha sido atendido por su pediatra debido a la huelga. La madre ha denunciado que «el menor lleva tres semanas con diarrea, se le han realizado varias pruebas de heces, se le ha retirado la lactosa de la dieta y también se le han practicado análisis de sangre y hoy le tenían que dar un resultado y nadie nos atiende». Tampoco le han dado en el mostrador una alternativa ya que ella se ha ofrecido a ir a cualquier otro pediatra de la ciudad pero le han respondido que «es imposible que le vean hoy porque no hay médicos».

Esta madre ha expresado su malestar por la falta de información y las repercusiones que podía tener el paro: «No estoy en contra de que hagan huelga y les apoyo porque entiendo que si mejoran sus condiciones también repercutirá en una mejor atención a la ciudadanía. Pero creo que no se ha informado debidamente y que hay que avisar o hacer una llamada telefónica previa cuando se está a la espera de unos resultados, al margen del tiempo perdido hoy y el lunes, para cuando se ha dado una nueva cita tras insistir en el mostrador».

La huelga de este viernes llega después de que CESM y SMA lamentaran la «ausencia total» de voluntad negociadora por parte de Sanidad, tras la reunión mantenida el martes con la directora general de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad, Celia Gómez, el subdirector general de Cohesión y Alta Inspección del Sistema Nacional de Salud, Juan Julián García, y el consejero técnico Miguel Ángel Máñez.

El ministerio liderado por Mónica García también ha rechazado en varias ocasiones retirar el actual borrador de Estatuto Marco y negociar un texto exclusivo para el colectivo médico, tal y como demandan CESM y SMA.