Por primera vez, un vuelo que debía aterrizar en Bilbao acaba tomando tierra en Hondarribia

Los usuarios del aeropuerto de Hondarribia están tristemente acostumbrados a que el aterrizaje de su vuelo de regreso a casa quede al albur de las condiciones meteorológicas. Ante fuertes rachas de viento, los pilotos tienen serias dificultades para aterrizar en Hondarribia y es habitual que los aviones tengan que dar media vuelta y dirigirse a los aeródromos vecinos de Loiu o Pamplona para tomar tierra. Sin embargo, este domingo sucedió a la inversa. Por primera vez en los casi 67 años de historia del aeropuerto, un avión con destino Loiu aterrizó en Hondarribia. Para encontrar un hecho similar hay que remontarse una década atrás. Según fuentes de Aena, el 24 de octubre de 2012 un vuelo que cubría la ruta Barcelona-Pamplona tuvo que aterrizar en el aeropuerto de Hondarribia ante la imposibilidad de hacerlo en la capital navarra. Se trata del antecedente más reciente de estas carecterísticas, pero nunca antes había ocurrido con un avión con destino Loiu.

Este historico aterrizaje se produjo ayer al mediodía. El viento obligó a desviar a Hondarribia un vuelo procedente de Madrid que debía aterrizar en Bilbao. Loiu registraba rachas de viento de hasta 56 kilómetros por hora y desde la torre de control informaron al piloto de que debía poner rumbo a Donostia. El avión, un Airbus A-320 de Iberia que cubría la ruta entre Adolfo Suárez-Barajas y Loiu en el vuelo IB426, aterrizó sin mayores contratiempos en el aeródromo guipuzcoano a las 13.18 horas, hora y media después de despegar desde Madrid.

¿Y cómo es posible que pudiese aterrizar en Hondarribia y no en Bilbao? Fuentes de Aena explican que el viento soplaba en la misma dirección de la pista, lo que hizo posible que el avión tomara tierra en el aeropuerto hondarribiarra sin dificultad.

Lo habitual es que el aeródromo seleccionado en estas situaciones sea Vitoria, o incluso que se ordene el regreso del avión a la ciudad de origen. Madrid para los vuelos de Iberia y Barcelona en el caso de Vueling. De hecho, el domingo por la tarde una aeronave con destino Loiu tuvo que regresar a la ciudad condal al no poder aterrizar por el vendaval.