La hostelería tira de otro récord de afiliación en Gipuzkoa y crea ocho de cada diez puestos

El tirón turístico de la Semana Santa es el principal causante de esta fortaleza del mercado laboral, ya que la hostelería acapara nada más y nada menos que ocho de cada diez puestos de trabajo creados el mes pasado en Gipuzkoa. 784 de los 1.094 empleos proceden en concreto de este sector. No hay más que recordar cómo han estado nuestras calles en los días festivos de abril, abarrotadas de visitantes y con las terrazas llenas, cuando además la meteorología se portó de maravilla con unos días soleados y templados.

Kino Martínez, secretario general de la Asociación Hostelería Gipuzkoa, atiende a DV para poner en valor la aportación que el sector viene realizando en el mercado laboral guipuzcoano. No en vano, la plantilla ha crecido «un 5,5%» respecto a abril de 2022 y también en la misma proporción «sobre 2019», antes de la pandemia. Desde su punto de vista, este auge en la contratación responde a los refuerzos que los negocios hosteleros y hoteleros están acometiendo ante las expectativas de una temporada veraniega que se prevé «buena».

Martínez hace énfasis en la oportunidad que la hostelería supone para sectores que por otra parte tendrían «difícil su integración» (los afiliados extranjeros copan ya ocho de cada diez nuevos empleos creados en Gipuzkoa) y se muestra crítico en cómo «algunos políticos denostan el turismo», sin olvidar la aportación que esta actividad económica hace además en impuestos a las arcas forales. Siendo un sector que acaba de alcanzar un acuerdo para renovar su convenio después de trece años sin un marco regulatorio, Martínez subraya la «estabilidad» que aportará y lo constata en las siguientes cifras: «El 97% de los contratos firmados en abril han sido indefinidos». En su asociación los registros son muy similares con un 96% de los pactos de carácter indefinido (gestionan 3.000 nóminas al mes).

Para poner en valor el ímpetu del mercado laboral guipuzcoano cabe destacar que en lo que llevamos de 2023 se han creado 5.287 empleos en Gipuzkoa, lo que se traduce en 44 al día. Un inusitado vigor que ha sorprendido incluso a la propia patronal vasca, Confebask, que ha calificado de «positivos» los datos de abril. Pablo Martín, del departamento económico-fiscal, ha asegurado que el mercado laboral vasco «se está comportando bastante bien en estos primeros meses del año», si bien se muestra cauteloso ante el futuro inmediato debido al escenario internacional marcado por la incertidumbre derivada de la guerra en Ucrania.

El comportamiento registrado en sanidad, industria y educación, todos ellos importantes históricamente por volumen de actividad y creación de empleo, ha sido mucho más discreto en Gipuzkoa. En salud se han creado 251 puestos de trabajo y la industria ha reclutado a 49 personas, mientras que en educación en cambio se han perdido 200.

En lo que respecta a Euskadi, la comunidad autónoma se queda a las puertas de lograr el millón de cotizantes. Suma un total de 997.243 afiliados tras ganar 2.588 nuevos cotizantes en abril en otro buen mes.

Al tiempo, 226 guipuzcoanos salieron de la cola del paro, aunque aún permanecen en ella 28.204. Esta tendencia positiva se ha registrado también en el conjunto de Euskadi, ya que el número de desempleados inscritos en Lanbide se ha reducido en 1.191 personas en relación al mes anterior (-1,09%), con lo que la cifra total de parados en Euskadi se ha situado en 108.001, el nivel más bajo desde diciembre de 2008, según los datos aportados por el Departamento de Trabajo y Empleo del Gobierno Vasco y el Ministerio de Trabajo y Economía Social.

En relación a abril de 2022, se contabilizan 7.553 parados menos inscritos en el servicio vasco de empleo, lo que supone un descenso interanual del 6,54%. Con todo, la caída del desempleo en Euskadi ha sido menor en términos porcentuales que la media estatal, que se ha reducido un 2,58% en la variación mensual y un 7,75% en la evolución interanual. Por cierto, en el gráfico anterior (variación mensual del paro en abril en España) pueden apreciar el impacto de la pandemia con ese impresionante aumento de 282.891 apuntados en la cola del paro.

Por lo que respecta a la contratación, se han formalizado 51.660 contratos en Euskadi durante el mes de abril, un 14,95% menos que en marzo (-9.084 contratos) y un 4,93% menos que en abril de 2022 (-2.680 contratos), si bien en ambos casos la caída fue menor que la media estatal, que fue del 12% en la variación mensual y de 20,19% en la interanual.Del total de la contratación, 13.141 son contratos indefinidos, el 25,44%. Este dato es un 21,72% inferior a marzo y un 20,89% menor que en el cuarto mes de 2022. Por su parte, los 38.519 contratos temporales suponen un 12,37% menos que el mes anterior y un 2,09% más que hace un año.

En el conjunto del Estado, los datos también son extraordinarios. Ningún mes de abril había conseguido crear tanto empleo como este. Es más, solo ha habido otro mes en la historia en el cual se han sumado más empleos que en abril de 2023, pero hay que remontarse a julio de 2005, en plena burbuja inmobiliaria.

Ahora, sin burbuja, con una guerra en Ucrania y una crisis de precios, en apenas 30 días la Seguridad Social ha conseguido incorporar 238.436 cotizantes medios en términos originales, todo un récord que lleva al sistema a un nuevo máximo: hay ya más de 20,6 millones de trabajadores en España, todo un hito de un mercado laboral que mantiene un dinamismo que sorprende a propios y ajenos.

Desde el departamento de Trabajo y Empleo del Gobierno Vasco subrayan que hay un «gran equilibrio que afianza el camino recorrido». Y es que Euskadi se halla en las cifras de paro más bajas desde 2008 y las más altas nunca conocidas a pesar de que en estos últimos quince años la cifra de población «es la misma y las jubilaciones han aumentado en unas 85.000 personas».

Desde Lakua inciden en que estos datos son un signo «de solidez» del tejido productivo, y un reflejo de cómo «la protección» del empleo durante la pandemia y la reforma laboral acordada con los agentes sociales «están teniendo el efecto» que se buscaba. Y destacan el descenso del paro en los jóvenes y también el efecto de la reforma laboral, que ha impulsado la estabilidad en el empleo. «Esa contratación indefinida se ha ido consolidando y supone una cuarta parte de los nuevos contratos, pero hay algún subsector, como el de actividades de los hogares, donde suponen nueve de cada diez nuevos contratos», agregan.