Euskadi busca que la industria 4.0 suponga el 40% del PIB con un plan de 4.100 millones

Según explicó la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, esta hoja de ruta «que está construida con una mirada a corto pensando en luchar contra los efectos de la pandemia pero también a largo plazo para sentar las bases del futuro», persigue que al final de ese periodo de cinco años el 40% del Producto Interior Bruto (PIB) vasco provenga de la industria manufacturera más avanzada y de los servicios conexos a la misma, la llamada Industria 4.0.

Se trata, añadió Tapia, de «apuntalar la recuperación situando a la empresa vasca en el mejor lugar ante los retos del Siglo XXI». La consejera repasó las grandes líneas del plan e incidió con vehemencia en la necesidad de inocular la llamada industria 4.0 en el tejido fabril vasco: «No cabe desarrollo productivo sin desarrollo e incorporación de servicios avanzados ligados a la digitalización, la tecnología y la sostenibilidad». En ese sentido, Tapia anunció para la próxima semana la constitución del Basque Artificial Intelligence Center (BAIC); una asociación privada de carácter empresarial que en su arranque tiene al Gobierno Vasco como agente promotor,

De la misma forma, añadió Tapia, el programa «tiene un profundo carácter transversal, alineado con el conjunto de estrategias de Euskadi orientadas a mejorar la competitividad, como el Plan e Ciencia, Tecnología e Innovación, la Estrategia de Transformación Digital, el Plan Berpiztu o el Plan Estratégico de Transición Energética y Cambio Climático 2021-2024».

«Todo –añadió– en el marco del 'Basque Green Deal', en el que Euskadi se compromete a ahondar en un nuevo modelo de desarrollo, inclusivo, y sostenible, para que el la industria vasca tendrá que responder sí o sí a la mejora de su digitalización y a un sistema de producción más sostenible, siempre con las personas en el centro de la empresa y el desafío de incorporar a la mujer».

Con todo eso en la coctelera, afirmó, «las previsiones de la industria vasca son buenas y las oportunidades que se pueden abrir son excelentes». «Con este plan 2021-2024 nuestro objetivo no puede limitarse a volver a la situación precovid, sino coger la siguiente ola y dar un nuevo salto cualitativo para situar a la industria vasca como un referente internacional, y que contribuya a crear riqueza, bienestar y empleo de calidad», sentenció.

El apoyo a la internacionalización de las empresas es uno de los grandes principios del plan aprobado por el Gobierno Vasco, con el que se busca, entre otras cosas, elevar la presencia de Euskadi y de la marca 'Basque Country' como sinónimo de calidad en el mundo. Entre los objetivos del programa se incluye el de alcanzar en 2024 la propensión exportadora de un tercio del PIB.

Eso, explicó Arantxa Tapia, e incrementar la tendencia de las empresas de la comunidad autónoma a establecer implantaciones en el exterior y elevar en un 10% la cifra de proyectos en los servicios de impulso a la internacionalización.

Y desveló que aunque se mantiene a Estados Unidos como «el mercado prioritario» junto a los más tradicionales como Alemania, Francia o Reino Unido, el plan «hace una apuesta contundente por los mercados asiáticos». Así, añadió, «para finales de este 2021 la Agencia Vasca de Internacionalización abrirá una nueva delegación comercial en Tokyo (Japón), con previsión de una segunda en Seúl (Corea)».