Las empresas de Gipuzkoa constatan ya la desaceleración pero logran blindar el empleo

Así lo destacó este jueves el director general de la Cámara de Comercio de Gipuzkoa, Javier Zubía, en la presentación de la segunda Encuesta de Perspectivas Económicas que elabora la institución cameral con las respuestas de más de 400 empresas de todos los sectores y que, como no podía ser de otra forma, evidencia que el tejido «anticipa una moderación en su actividad».

«Sólo el 6% de nuestras empresas prevé rebajar su plantilla en los próximos doce meses (en abril era un 8%), mientras el 77% apuesta por la estabilidad y el 17% por el crecimiento», explicó el ejecutivo, que calificó ese escenario de «muy buena noticia». Esa apuesta por fortificar la fuerza laboral es, afirmó el directivo, «muy loable».

Los datos de la encuesta revelan que la industria es el sector guipuzcoano en el que más empresas se plantean ampliar plantilla (el 22%), seguida de los Servicios (19%), la Construcción (15%) y el Comercio (11%). En el extremo opuesto, los ajustes parecen más factibles en la construcción (el 10% da por hecho que su plantilla mermará en los próximos doce meses).

La clave de esa resistencia del empleo, insistió Zubía, hay que buscarla en que «falta gente, y eso es un problema muy serio en una economía que quiere crecer». Prueba de ello, remacha, es que en una reciente feria de empleo de la Cámara, «había lista de espera de empresas que buscaban candidatos para contratar». «Hay falta de personal y eso es una suerte para quienes se acercan al mercado de trabajo o buscan mejorar, aunque con la pirámide poblacional que tenemos es algo a vigilar muy de cerca y una de las grandes prioridades de la Cámara de Gipuzkoa», sentencia.

De vuelta al informe, la foto resulta, incluso, algo más positiva que la sensación imperante en el panorama macroeconómico. «Las empresas reducen sus expectativas de crecimiento de ventas para los próximos meses, aunque se mantienen positivas», dice.

La estabilidad es la perspectiva para el 50%. Junto a eso, un 33% anticipa crecimiento y un 17% prevé una reducción de su cifra de negocios, explicó Zubía, que comparecía acompañado de Iñigo Muguruza, director de márketing de la Cámara.

Tanto la industria, la construcción como los servicios presentan una caída significativa de las empresas que apuestan por incrementar su cifra de negocio (entre 16 y 25 puntos, según el sector), con un incremento paralelo de las empresas que consideran que su cifra de negocios se mantendrá estable.

En el comercio, sin embargo, las empresas que esperan ver crecer sus ventas no varían y esa ratio se sitúa en el 32% del total, mientras que son menos los comercios que esperan perder ventas (un 20%), «lo que no deja de ser un porcentaje importante», según Zubía.

El responsable cameral se detuvo en el análisis de la industria, en la que, afirmó, se aprecia una «doble realidad». Por un lado, explicó, hay grandes empresas tractoras a las que les está yendo muy bien y con una carga de trabajo que alimentará a otras auxiliares. ¿En qué sectores? Básicamente, en la máquina-herramienta, los bienes de equipo o la energía. En general, dijo, en sectores con periodos de maduración largos.

Esa es la cara. Y la cruz, desveló, la protagonizan negocios como la distribución (la gran alimentación), en la que el tique medio está bajando y crece la marca blanca, o aquellas empresas a las que los cuellos de botella del comercio mundial favorecieron con un sobre stock de sus clientes, que ahora han dejado de comprar.

La inversión, por su parte, marca una tendencia similar a la de empleo: el crecimiento de principios del año tiende a moderarse y desciende del 30% al 22% el porcentaje de las empresas con intención de aumentarla, lo que hace engrosar el número de las que la mantendrán (61%).

El documento de la Cámara señala que las empresas manifiestan un cierto pesimismo en lo que respecta a la evolución de la coyuntura económica general en los próximos meses. Y aunque (una vez más) la estabilidad prima (56% de las respuestas), por primera vez son más numerosas las respuestas pesimistas (26%) que las optimistas (18%). Son las empresas industriales las que muestran el sesgo más pesimista con un 31% de las respuestas, que llega al 27% en el caso del comercio, al 20% en servicios y al 15% en el sector de la construcción.