Aimar Olaizola: «Solo si me veo muy bien jugaré el Manomanista»

- Está a punto de cumplirse un año de su lesión en el tendón del cuádriceps. ¿Olvidada?

- Estoy jugando sin molestias y sin miedo alguno. Ya había sufrido con anterioridad lesiones graves, pero de esta me costó recuperarme porque debe ser un punto muy exigido por la actividad propia del pelotari. Hacia el final del verano acabé de quitar los miedos y ahora mismo ni me acuerdo de aquella lesión.

- ¿Pasa revisiones?

- Tomo un masaje a la semana, como antes de esa lesión. Tras la recuperación, hice dos o tres visitas más a Vitoria a la consulta de la fisioterapeuta Itxaso Sánchez, pero nada más. Desaparecieron las molestias.

- ¿Le han recomendado ejercicios específicos?

- Al principio hacía algunos. Sentía ciertas molestias. Desde mediados de noviembre, aproximadamente, la normalidad es absoluta.

- ¿Han sumado menos puntos de los previstos a estas alturas del Campeonato de Parejas?

- Hay que ser realistas. Nos está costando. Ya lo veía difícil desde el principio. Urrutikoetxea y yo fuimos campeones juntos hace cuatro años, pero también entonces nos costaba ganar los partidos. Tampoco fue fácil. Mikel es delantero y tiene un mérito enorme jugar atrás. Es mucho más difícil de lo que cree la gente. Ninguno de los dos estamos al nivel de entonces. Yo noto la edad. Durante los partidos pasamos mucho tiempo defendiendo. Asimismo, en la actualidad me cuesta más abrir huecos y pegar pelotazos largos.

- Han pecado de irregulares.

- Nos está faltando jugar tres o cuatro buenos partidos seguidos. Es importante para hacer pareja. Normalmente, somos dos pelotaris seguros y con un rendimiento regular. Mikel venía de estar parado tres meses y además, una vez iniciado el Campeonato, paró dos jornadas por culpa de la mano. Si encadenamos dos o tres buenos encuentros, todavía podemos ir hacia arriba.

- Han caído dos veces por 22-9, si bien en Irun perdió en compañía de Aretxabaleta.

- Esos resultados restan confianza. Necesitamos estar al cien por cien de nuestro rendimiento o cerca de ese porcentaje para conservar opciones de victoria. De todas maneras, todavía hay tiempo.

- La sexta plaza sigue cerca.

- Si tenemos en cuenta lo que hemos hecho hasta ahora y estamos a un punto... Nos faltan partidos contra rivales directos: Irribarria-Rezusta, Ezkurdia-Martija, Altuna III-Galarza y Laso-Albisu, a los que nos medimos mañana en el Labrit. Además, veo mejor a Urrutikoetxea. Tenemos capacidad para dar guerra. De todas maneras, será difícil.

- ¿Han tenido problemas de compenetración sobre la cancha?

- Situaciones en las que he dudado entre dejar pasar o no la pelota, y no nos hemos entendido. Como Mikel juega de distinta manera a la mayoría de los zagueros, no acabo de darme cuenta si lo tengo encima o está más atrás. Y eso que Urrutikoetxea es un pelotari con el que he coincidido en numerosos entrenamientos. También jugamos juntos el Campeonato de Parejas de hace cuatro años. Parece mentira, pero es así.

- ¿Cuántos puntos harán falta para entrar en el play-off?

- Seis. Aunque corres el riesgo de quedarte fuera con esa misma puntuación. Por eso son importantes los resultados contra rivales directos.

- La lesión en el tendón le impidió participar en el Manomanista de 2019. ¿Jugará este año?

- Ni lo he pensado ni he hablado de ello con la empresa. De momento estoy centrado y metido de lleno en el Campeonato de Parejas. Ahora mismo, no lo tengo en la cabeza. Si me animo, tengo claro que haré antes un par de entrenamientos para comprobar si estoy o no en condiciones de participar.

- Entonces, existe la posibilidad...

- Solo si me veo muy bien jugaré el Manomanista. Lo que no quiero es salir por salir. Ya dije cuando renuncié al último Campeonato del Cuatro y Medio que a estas alturas de mi carrera no tengo nada que demostrar ni en esa modalidad ni en el mano a mano en toda la cancha.

- ¿Cómo le va en su nueva faceta de entrenador de los hermanos Lizeaga, los juveniles de Astigarraga?

- Estoy muy contento. Siempre he dicho que me gusta esa labor porque vivo a fondo la pelota, veo jugar a otros... También he agradecido que otra gente estuviera pendiente de mí. Desde ese punto de vista, nuestra plantilla ha dispuesto de técnicos, preparadores, médicos, fisios, instalaciones... Asimismo, coincido con Zubizarreta en Beasain. Los Lizeaga son trabajadores y, en mi opinión, pelotaris con un gran futuro.