Van der Poel, tras 80 kilómetros en fuga: «Me lo he pasado bien»

«No fue un mal intento, me lo pasé bien», señaló Van der Poel tras una exhibición sin recompensa. «El ataque surgió en ese momento, no estaba planeado. Creo que es la mejor manera de prepararse para lo que está por venir. Y debo decir que lo paso bien de esta manera».

«Me acompañó Narváez, que tiró muy fuerte», alabó al ecuatoriano del Ineos. «Eso me ayudó mucho. Esperaba hacer la selección. Tenía la esperanza de que un grupo de favoritos se uniera a nosotros después del Kwaremont. No fue así. Dudé entre seguir o no con el intento, pero no paramos. En realidad, la decisión no fue tan mala. Los corredores que nos acompañaban colaboraron, así que opté por no atacar. Creo que no habría ido más rápido por mi cuenta».

Solo cedieron a kilómetros y medio de la línea de meta. «Al final, simplemente no funcionó. Seguí creyendo en la fuga porque la diferencia con el grupo perseguidor se atascó en los 20 segundos. Pero todavía había equipos con más de un corredor en el pelotón, hombres que podían vaciarse. No fue un mal intento».

Un acelerón por detrás del campeón danés Asgreen, que en realidad solo llevaba a un compañero del Deceuninck a su lado -el casi desconocido Van Lerberghe-, propició la caza, bien aprovechada por Mads Pedersen (Trek), campeón del mundo en 2019 para vencer. Le vino bien la maniobra de su compatriota.

Van der Poel compite este martes en Le Samyn, otra prueba belga. «Tres días de competición son suficientes para mí. Eso creo. Me siento bastante bien con vistas a la Strade Bianche del sábado. No siento que tenga que corregir nada allí. Es una carrera difícil y quiero volver a ella».

Siente el holandés que ha empezado mejor que en 2020. «Realmente, la pasada temporada no me encontré bien el primer mes. Ahora me noto muy diferente. He hecho motocross y en la Kuurne he comprobado que las piernas funcionan».

Alex Aranburu, que terminó en el segundo grupo a 1:48 del ganador Mads Pedersen, no estuvo tan bien como la víspera en la Omloop. «Todo el mundo está nervioso y el posicionamiento es muy importante. Estoy contento con mi inicio de campaña», asegura el ezkiotarra.