El Bidasoa Irun rescata un punto milagroso
Iñigo Aristizabal
Domingo, 15 de septiembre 2024, 22:24
La andadura de Alex Mozas en el Bidasoa Irun no pudo empezar con victoria pero sí sumando. El 26-26 en la visita al recién ascendido Villa de Aranda se puede dar por bueno por dos motivos. Primero, porque faltaron a la cita los centrales Gorka Nieto, Pedro Pacheco y Asier Iribar, más el lateral izquierdo Tito Díaz. Y, segundo, porque a falta de dos minutos y treinta segundos el marcador mostraba tres goles de diferencia, 26-23. Un parcial de 0-3 en la recta final del partido sirvió para rescatar un punto.
Acortó distancias Asier Nieto (27'40''), rompiendo una racha de seis minutos sin marcar, y se entró en el último minuto con dos de desventaja. A cincuenta segundos del final Cavero acertó desde los siete metros, 26-25. Balón para el equipo local, que detuvo, como antes había hecho otras once veces en media hora, Leo Maciel. Contraataque y penalti sobre Cavero, sonó la bocina del final. Con tiempo agotado, el extremo irundarra tuvo la oportunidad de empatar desde los siete metros y no la desaprovechó. Seis de seis para él desde esa distancia, ocho de nueve en total y, sobre todo, ese punto rescatado para no empezar la liga con derrota.
El arranque del partido no indicaba un final así, porque el Bidasoa Irun se mostró solvente y para el minuto doce ya tenía tres goles de renta, 3-6, con tres tantos a la contra. Poco después llegaron los primeros cambios (entraron los dos Salinas, Boskos y, al poco, Jon Ander Iribar) y para el minuto 17 el equipo completo, salvo el portero, era distinto al inicial.
Un golazo de cadera firmado por Boskos puso el 8-9, última ventaja amarilla del primer tiempo. El Villa de Aranda había subido un grado en la intensidad defensiva y los bidasotarras tenían problemas para encontrar la portería rival, donde además Guitart detuvo seis balones hasta el descanso. Mejoró después y acabó con dieciséis paradas.
Parcial de 5-1
El conjunto arandino no había logrado ningún gol de contraataque hasta ese momento y firmó cuatro casi consecutivos, dentro del parcial de 5-1 que dejó sin respuesta al Bidasoa. Del 13-10 se pasó al 14-12 con el que se llegó al descanso, y la diferencia de 2-3 goles se mantuvo hasta el 17-15, en el minuto 35.
Leo Maciel había sustituido a Jakub Skrzyrniarz bajo palos y empezó a parar. También desde los siete metros, como por ejemplo cuando el marcador mostraba un 18-18. En inferioridad numérica, Boskos devolvió el mando en el marcador al Bidasoa, 18-19, y Cavero aumentó la renta a dos goles, 18-20, que se mantuvo hasta el 19-21.
Eran indicios de que los de Alex Mozas podían encarrilar el partido, pero sucedió lo contrario, con un nuevo arreón burgalés. Desde el 19-21 hasta el 26-24, el conjunto amarillo solo fue capaz de marcar dos goles en trece minutos, los dos por mediación de Rodrigo Salinas. El Villa de Aranda endosó un parcial de 7-2 al subcampeón y puso en el marcador ese 26-23 con el que vio muy cerca la victoria, que iba a ser la guinda a las fiestas locales. Pero no se rindieron los irundarras y, de la manera antes relatada, rescataron un punto en el debut de la competición.
El domingo, el Barça
Las emociones fuertes llegan nada más empezar la liga, puesto que el siguiente rival será el Barça, el próximo domingo en Artaleku, a las 20.00 horas.