El Bera Bera sufre pero ya saborea el título de Liga (28-25)
Se impone al Granollers en un igualado partido que el equipo ha resuelto en los últimos diez minutos gracias a las paradas de Alice y una gran actitud ofensiva
Costó más de lo esperado pero el Super Amara Bera Bera sumó ayer una importantísima victoria frente al Granollers (28-25) que le permite empezar a saborear ya el título de la Liga GuerrerasIberdrola. Un triunfo forjado en los últimos ocho minutos a base de espíritu competitivo y carácter dedicado al padre de Mirene Moreno, fallecido este sábado. La jugadora no participó en el partido.
Quizá esta triste noticia fue la que provocó que las donostiarras tardaran varios minutos en concentrarse y empezar a desarrollar su juego habitual. Aunque también es cierto que las catalanas apretaron mucho de principio a fin hasta el punto de irse por delante al descanso (13-14) y gozar de una ventaja de cuatro goles nada más arrancar la segunda parte (14-18, min. 33).
Super Amara
Alice (12 paradas), M.Etxeberria (1 gol), Cavo(2), Arrojeria (5), Fernandes (5), Hernández (5, 1p), Cesáreo (5) -siete inicial- Aalla (1 parada), Gil (1), Menéndez (1), Boada (3), O'Mullony, Loidi, Polonio y A. Etxeberria.
28
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25
Granollers
Mera (7 paradas), González (5 goles), Kofler (1), Prelchi (3), Sarandeva (2), Guarieiro (9, 1p), Vegué (4) -siete inicial- Wiggins (5 paradas), Ben Chayhab, Vázquez, Monllor, Milagros, Tamada y Sobrepera (1).
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Parciales cada 5 minutos: 1-3, 3-5, 6-8, 8-9, 10-10, 13-14 (descanso); 16-18, 19-18, 20-20, 22-21, 25-23 y 28-25.
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Árbitro: Rosendo y García (colegio gallego-madrileño). Excluyeron a las locales Loidi, Cesáreo, O'Mullony y M. Etxeberria y a las visitantes Prelchi, Guarieiro (2) y Milagros.
Sin embargo, un parcial de 6-0 liderado por una imperial Cesáreo –del 14-18 se pasó al 20-18– y las paradas de Alice en momentos decisivos –terminó con doce– decantaron la balanza en favor del Bera Bera. Antes, eso sí, las protagonistas habían sido Hernández y Fernandes. Porque ellas dos se encargaron de sostener al equipo cuando peor lo estaba pasando en los compases iniciales.
El Granollers salió enchufado de los vestuarios y en apenas tres minutos logró cuatro goles de renta. Pero cuando el Super Amara se puso las pilas y remontó ya no volvió a estar más por detrás en el marcador. Hubo empates a dieciocho, veinte, veintiuno, veintidós y veintitrés pero la efectividad en ataque de las guipuzcoanas en el tramo final se impuso a la defensa barcelonesa.