El coro ucraniano proclama su «orgullo de país» tras arrasar en el Certamen de Tolosa

En el plano estrictamente musical, los ucranianos han arrasado con una puntuación altísima del 94,10%, una cifra a la que pocas agrupaciones han llegado a lo largo de la historia del certamen tolosarra. Se llevan a su país los trofeos de oro en polifonía y folclore, el premio del público –patrocinado por DV–, y el galardón más importante, el 'Gran Premio Kutxa', al ser el más puntuado en el conjunto de su actuación. Este triunfo le otorga la clasificación para el Gran Premio Europeo de la Música Coral, que se celebrará el próximo año en Debrecen (Hungria).

Xabier Sarasola, presidente del jurado, confiesa que, cuando el coro Sophia entró por primera vez en el escenario, arropado por una entusiasta recepción del público, llegó a pensar que esta circunstancia podría condicionar su actuación, e influir en el resultado final. «Pero fue empezar a cantar, y al instante te dabas cuenta de que delante había un coro sublime, y te olvidabas de todo lo demás». Dice Sarasola que el jurado se tiene que abstraer de los factores ajenos a la música. «Nosotros valoramos exclusivamente su actuación, aunque somos conscientes, por supuesto, de todo lo que están pasando. Pero, en este caso, han ganado merecidamente», asegura el compositor beasaindarra.

El jurado se deshace en elogios a la hora de destacar las virtudes del Sophia Chamber Choir. «Si empiezas a analizar por cuerdas, la definición de los cantantes es totalmente empastada. Su sonido, maduro; y la técnica, impresionante. Qué decir del trabajo de dirección. Si a todo esto le añades un repertorio muy exigente..., el resultado está ahí. Es un coro espectacular», resume Sarasola

El 53º Certamen Coral de Tolosa ha tenido un nivel musical altísimo, incluso por encima de lo esperado, teniendo en cuenta las circunstancias derivadas de la pandemia, que han impedido trabajar con normalidad a las agrupaciones. Pero lo cierto es que ha habido siete coros con puntuaciones superiores al 85%, lo que se considera nivel de primer premio: el ucraniano, los dos letones, el esloveno, el norteamericano, el irlandés, y el polaco.

Al jurado también le ha sorprendido este elevado nivel. «Es digno de elogio que se haya trabajado tan bien en esta época difícil. Hay mucho ensayo por detrás», expone Sarasola, quien también destaca la calidad del coro infantil ganador. «Me han gustado mucho las niñas de Riga. Que a esa edad sean capaces de cantar con tanto criterio musical es impresionante. Es una coral exquisita; se nota que por detrás existe un gran trabajo pedagógico, todas las chicas cantaban igual, empastadas, y presentaron un repertorio precioso».

El coro femenino esloveno, con dos trofeos de plata, ha sido otro de los triunfadores. Su puntuación global del 90,30% le hubiera valido para obtener el primer premio en algunas de las ediciones anteriores del concurso. Para el jurado, su nivel ha sido «absolutamente espectacular».

Xabier Sarasola analiza la participación de otras agrupaciones: «el coro valenciano me ha sorprendido mucho. Aunque tiene cosas para trabajar, ha mostrado un meritorio nivel. Los coros de Irlanda, Polonia y Estados Unidos han estado muy bien». ¿Y el coro de México?: «creo que tiene falta de criterio coral de lo que es el trabajo en grupo; aunque las voces de los cantantes eran muy buenas, les faltaba conjunción».

Luis Miguel Espinosa, director del Certamen de Tolosa, ya confiaba en corroborar las expectativas que había generado la selección de las corales. «Sabíamos que todas iban a dar nivel, pero había que ratificarlo con las actuaciones, y estamos muy contentos del resultado final, que nos da ánimos para seguir en esta línea de trabajo». De cara al futuro, la organización del concurso tolosarra confía en llegar a la «normalización plena» que supondría la participación de coros de Asia y tal vez de Sudafrica. «Ya tenemos contactos con algún grupo de Japón, pero de momento no podemos concretar nada».

La ausencia, este año, de un coro vasco, es relativizada, tanto por la organización como por el jurado. «Somos un país pequeño y el Certamen de Tolosa es la 'Champions'. Euskadi no puede dar en todas las ediciones coros ganadores para participar en un concurso tan exigente como éste. Pero tenemos que estar muy orgullosos. Cuando los coros de Euskadi compiten en certámenes internacionales, dan un gran nivel y obtienen premios», aseguran.

El 53º Certamen deja también como legado la belleza de muchas composiciones recientes de autores vascos, cuya calidad ha sido reconocida por los directores de las agrupaciones participantes. Piezas tan hermosas como las obligadas 'Ave Maria Gratia Plena' (Josu Elberdin) y 'Kolorezko Kaiola' (David Azurza), o 'Errota' (Junkal Guerrero), junto a otras de Javier Busto, Xabier Sarasola, Idoia Azurmendi, Lorenzo Ondarra y muchos otros autores, que ya forman parte del repertorio de todos estos coros extranjeros que difunden la música en euskera por todo el mundo.

Un año más, más allá de los premios, el certamen de Tolosa ha dado a conocer múltiples y variadas propuestas corales, nueva literatura, distintos conceptos vocales. Y sigue animando a nuestros compositores a escribir nueva música coral, y a darla a conocer.